Bruno, así se llama un gatito que fue devuelto a un refugio en Nueva Jersey, Estados Unidos. Una madre soltera y su hija habían adoptado al minino, pero lo devolvieron al considerar que era «demasiado cariñoso».
La tierna mascota había llegado por primera vez al refugio «Montville Animal Shelter» en noviembre del año pasado. El hijo de sus dueños anteriores se volvió alérgico al gato, por lo que la familia optó por darlo en adopción.
Dos meses más tarde, cuando llegaron al recinto una madre soltera y su hija pequeña en busca de una primera mascota, el personal del refugio les ofreció a Bruno.
Sin embargo, el nuevo hogar de la peculiar mascota sería solo por una semana. Las nuevas dueñas decidieron devolverlo, porque el gato «era demasiado cariñoso, siempre quiso sentarse en sus regazos, seguirlas, incluso quiso dormir en la cama de la hija pequeña», reseña una publicación en Facebook de «Montville Animal Shelter».
En pocos días, la publicación registró más de 200.000 visitas y cientos de comentarios. Ello hizo que las solicitudes de adopción comenzaran a llegar.
Gracias al post que destacaba que el gatito era muy sociable, que se lleva muy bien con otros gatos, incluso con los perros, Bruno logró conseguir una nueva familia, y no solo él. Muchas personas se dirigieron al refugio con el propósito de adoptar al cariñoso felino y al no estar disponible, optaron por llevar a casa a otros gatitos.