El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se autopremió con la medalla “mérito indigenista”, pese a ser cuestionado por sus políticas antiecológicas indígenas.
Esta medalla se le otorga a personalidades que apoyan y trabajan en pro de estas comunidades; sin embargo, a Bolsonaro lo han criticado por promover la explotación económica de sus territorios.
“Somos exactamente iguales. Todos vinimos a la tierra por la gracia de Dios“, indicó el Mandatario brasileño. Al tiempo, agregó que los indígenas “están ahora más integrados en la sociedad”.
“Ustedes llegaron aquí mucho antes que nosotros, pero cada vez más nos vamos integrando“, añadió el presidente Bolsonaro al recibir la medalla al mérito indigenista mientras tenia en brazos a una niña.
“Estoy seguro de que en los últimos tres años (desde que llegó al poder) nos hemos acercado mucho, mucho más que en épocas anteriores. Los queremos de nuestro lado. Queremos que hagan en sus tierras exactamente lo que hacemos en las nuestras”, indicó el ultraderechista.
Política anti-indígena
El presidente ultraconservador inició su mandato en 2019, bajo la promesa de no demarcar “ni un centímetro más de tierra para los indígenas”, lo que ha cumplido hasta el momento,
Además, defiende la minería, por lo que, con ayuda del Congreso busca acelerar varios proyectos considerados perjudiciales para los indígenas y el medio ambiente.
En 2022, la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB) denunció a Bolsonaro ante la Corte Penal Internacional (CPI) por su “política anti-indígena”, que calificaron de “genocidio” y “ecocidio”.
Las comunidades indígenas en Brasil representan 0,5% de los 212 millones de ciudadanos y sus reservas ocupan el 13% de todo el territorio del país.
