En Reino Unido, decenas de miles de médicos abandonaron este martes sus puestos de trabajo para dar inicio a una huelga de cuatro días. Se espera que esta parálisis cause una interrupción sin precedentes en el servicio de salud público.
La huelga de médicos jóvenes, que forman la columna vertebral de la atención hospitalaria y clínica en el Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés), durará hasta las 7 am del sábado.
“Va a ser el período de huelga más disruptivo que hemos visto este invierno, probablemente el período de acción más disruptivo en la historia del NHS”, aseguró Stephen Powis, director médico del NHS de Inglaterra.
Se prevé que unas 350 mil citas médicas, incluidas operaciones, sean canceladas por la medida de fuerza que secundan estos profesionales miembros de la Asociación Médica Británica (BMA).
Los médicos exigen un aumento salarial
Según los datos de la BMA, los médicos británicos ven mermados sus salarios en un 26%, debido a que los aumentos salariales se mantienen por debajo de la inflación, que actualmente está en 10,1%.
En ese sentido, la BMA alerta que el problema salarial dificulta el reclutamiento y la retención de médicos residentes. Por ello exige un aumento de sueldo en torno al 35%. Sin embargo, el Gobierno considera inasequible esa demanda.
Los médicos no son los únicos que protestan en Reino Unido. En los últimos meses, los británicos han debido hacer frente a una ola de huelgas.
Las enfermeras, los equipos de ambulancias, los maestros, el personal fronterizo, los examinadores de manejo. Así, como los conductores de autobuses y los trabajadores postales han dejado sus trabajos para exigir salarios más altos.
