La gripe aviar continúa propagándose por Latinoamérica. En Perú, las autoridades de ese país reportaron que al menos 716 lobos marinos han muerto debido a la cepa H5N1.
Según una organización internacional dedicada a la protección de los océanos, que lleva el nombre de “Oceana”, la población de lobos marinos en Perú ascendía a 110.000 en 2020. Estos mamíferos estaban ubicados principalmente en la región costera de Ica y la reserva natural de Paracas.
La población de esta especie ha ido descendiendo afectada por la influenza aviar, que no tiene cura. En las últimas semanas, equipos del Servicio Nacional Forestal y de Vida Silvestre de Perú, han recolectado y enterrado cientos de lobos marinos de varias playas a lo largo de la costa central de Perú.
🚨ATENCIÓN CON LOS LOBOS MARINOS VARADOS. EVITEMOS EL CONTAGIO DE LA INFLUENZA AVIAR H5N1
El varamiento de #LobosMarinos en el litoral es preocupante, pero estos solo deben ser atendidos por especialistas. ¿Cuáles son los riesgos de acercarte a estos animales? Léelo aquí👇🏻 pic.twitter.com/BobdoUSsiX
— Oceana Perú (@Oceana_Peru) February 18, 2023
El primer caso de gripe aviar en Perú se reportó en noviembre del año pasado. El virus fue detectado en aves al norte del país andino. De acuerdo a datos del gobierno, el virus ha causado la muerte de por lo menos 63.000 pájaros.
En ese sentido, luego de detectarse los casos de gripe aviar, Perú declaró alerta epidemiológica y sanitaria en el país. Entre otras cosas, recomendó que las aves sacrificadas sean enterradas con un mínimo de dos metros de profundidad.
Gripe aviar en Latinoamérica
Junto a Perú, al menos otros 10 países de la región han reportado casos de gripe aviar.
En Chile, la semana pasada, las autoridades detectaron el primer caso positivo en un mamífero marino. Se trató de un lobo marino en una playa del norte del país.
A pesar de que Brasil es el mayor exportador de aves de corral del mundo, aún no ha reportado casos confirmados de gripe aviar.
Según la Organización Mundial de Sanidad Animal, la influenza altamente patógena ha provocado la muerte de más de 200 millones de aves en el mundo.