La seguridad alimentaria en Túnez se encuentra en estado de alarma, esto como consecuencia de 3 años de sequía en el país africano.
En consecuencia, las cosechas de Túnez se están amenazadas por el bajo nivel de agua en los embalses, lo que agrava la economía del país.
Esta situación ha empujado al gobierno tunecino a aumentar los precios del agua del grifo para hogares y empresas.
Desde septiembre, solo cayeron 110 millones de metros cúbicos de lluvia en Túnez, alrededor de una quinta parte de la tasa normal.
Tanto, los funcionarios del sindicato de agricultores y el principal sindicato advierten que los cultivos de cereales sufrirán, lo que se suma a los problemas existentes de suministro de alimentos.
El cambio climático y los eventos climáticos recurrentes están haciendo que los países con escasez de agua como Túnez sean más secos
Por tanto, estos fenómenos climáticos contribuyen afectan negativamente a los principales cultivos de secano, como el trigo y la cebada, y al ganado. Como resultado, los agricultores se vuelven más vulnerables a medida que el cambio climático y las teleconexiones hacen que las temperaturas aumenten y las precipitaciones se vuelvan más esporádicas.
La agricultura es importante para las comunidades rurales y la economía tunecina en general. El 20% de la población está empleada en la agricultura, que representa el 10 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país del norte de África y entre el 10 y el 12 por ciento de las exportaciones totales, en promedio.
Three years of drought have dried up Tunisian reservoirs, threatening harvests that are critical to the North African country's battered economy and pushing the government to raise tap water prices for homes and businesses. https://t.co/4rhEmGmTZQ
— Reuters Science News (@ReutersScience) January 11, 2023
