Tras haber estado cerrada por la polémica de contaminación en sus productos, y desencadenar una escasez de leche para bebés en Estados Unidos, finalmente Abbott Nutrition reinició la producción en la fábrica de fórmula para bebés de Michigan.
De acuerdo a información de AP, el cierre en febrero de la fábrica de fórmulas más grande del país provocó incertidumbre en el suministro, lo que obligó a algunos padres a buscar fórmulas en bancos de alimentos, amigos y consultorios médicos; además de generar una alerta hasta en el estado de Nueva York, debido al acaparamiento y hasta especulación por el producto.
En consecuencia, Abbott precisaron que inicialmente priorizará la producción de sus fórmulas especiales EleCare para bebés con alergias alimentarias graves y problemas digestivos que tienen pocas otras opciones de nutrición.
A su vez, la compañía de alimentos, prometió que les llevará hasta tres semanas, antes de que la nueva fórmula llegue hasta sus consumidores.
La reapertura de la planta es una de varias acciones federales que se espera que mejoren los suministros en las próximas semanas.
La administración de Joe Biden, espera que con esto se alivie la crisis, que obligó hasta importar fórmulas de bebés desde bases militares; y por ende, la flexibilización de reglas de importación de fabricantes extranjeros.
Abbott Nutrition has restarted production at the Michigan factory that's tied to the ongoing baby formula shortage. The plant had been closed since February due to contamination, and that's led to nationwide supply problems. https://t.co/QYKOkESERU
— The Associated Press (@AP) June 4, 2022
Abbot a lavar su imagen
Ahora será el momento de Abott en resarcir sus daños colaterales, y lavar la cara a su imagen; tomando en cuenta que el cierre de su fábrica de Sturgis, Michigan, en febrero de 2022, después de que la Administración de Alimentos y Medicamentos comenzó a investigar cuatro infecciones bacterianas entre los bebés que consumían fórmula en polvo de la planta.
De esta situación dos de los bebés murieron. Sobre el caso, la compañía continúa afirmando que sus productos no se han relacionado directamente con las infecciones, que involucraron diferentes cepas bacterianas, destaca AP.
En tanto, los inspectores de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) finalmente descubrieron una serie de violaciones en la planta, incluida la contaminación bacteriana, un techo con fugas y protocolos de seguridad laxos. La FDA se ha enfrentado a un intenso escrutinio por tomar meses para cerrar la planta y luego negociar su reapertura.