El sabotaje al gasoducto Nord Stream en el mar Báltico, no solo enciende las alarmas de seguridad energéticas, sino también las climáticas.
De acuerdo a un trabajo de AP, las emisiones de metano pueden desencadenar problemas ambientales globales, que en ocasiones no son reportadas.
Al respecto, científicos del clima han descubierto que las emisiones de metano de la industria del petróleo y el gas son mucho peores de lo que informan las empresas.
Precisan que los satélites en el espacio han descubierto que las emisiones de metano de las operaciones de petróleo y gas suelen ser al menos el doble.
Los gobiernos de todo el mundo, especialmente en los Estados Unidos, también son conocidos por subestimar la cantidad de metano que se escapa al aire. Sostiene Robert Howarth, profesor de la Universidad de Cornell (EEUU).
La Agencia de Protección Ambiental utiliza el autoinforme voluntario de la industria, en lugar de la verificación independiente, que es lo que se necesita, recalca Robert Howarth.
Grandes fugas de metano
Inclusive, señalan que Turkmenistán se encuentra entre los peores infractores por liberar metano a la atmósfera, mientras que Arabia Saudita está entre los mejores para capturarlo.
Las mediciones satelitales, también estiman que se han observado más de 1500 grandes fugas de metano en todo el mundo, y potencialmente decenas de miles de fugas más pequeñas.
As serious as the methane escaping from ruptured pipelines on the floor of the Baltic Sea may be, there are alarming incidents of massive methane releases around the world frequently. https://t.co/iZV5FdrdNG
— The Associated Press (@AP) September 30, 2022