El exembajador de Venezuela y analista internacional, Wilmer De Pablos, se pronunció sobre el reciente informe entregado por la ONU, respecto a la violación de los derechos humanos del diplomático venezolano, Alex Saab.
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Vale mencionar que el mencionado informe de la Organización de las Naciones Unidas, fue entregado al presidente de Estados Unidos (EEUU), Joe Biden. Asimismo, el documento se elaboró en septiembre pasado; sin embargo, no fue hasta el 20 de septiembre que se hizo de conocimiento público. Dicho archivo recopiló una serie de evidencias que demuestran cómo se vulneraron los derechos humanos del enviado especial venezolano.
De acuerdo con esta Relatoría Especial de la ONU, Alex Saab sufrió una persecución judicial por parte de EEUU cuando se violó su inmunidad diplomática. El texto además demuestra que Washington incumplió con las normas estipuladas en el derecho internacional.
¿Qué dijo Wilmer De Pablos?
Durante una entrevista en Canal I, denunció que este informe de la ONU demuestra la violación de los DDHH y de la Convención de Viena, y que todos los diplomáticos se ven reflejados en el caso de Alex Saab.
«Saab procuró en su condición de Enviado especial del Gobierno venezolano de proveernos de energía, alimentación y medicamentos en los momentos más duros y rudos que ha vivido Venezuela con el tema de las medidas coercitivas unilaterales, que erróneamente las llamamos sanciones».
El también miembro del Movimiento Free Alex Saab, mencionó la relatoría especial a cargo de Alena Dohuan. La misma hace referencia a la obligación de derechos humanos sobre Saab, haciendo énfasis en la Convención de Viena y la Convención de La Habana.
Como resultado, señala que estas convenciones garantizan el respeto a la inmunidad de los diplomáticos, por la que Estados Unidos debe responder.
Seguidamente, De Pablos aseguró que el caso del diplomático venezolano se desarrolla según la realidad de Miami y de los tribunales estadounidenses. Además, el retardo procesal, forma parte de un caso que «está viciado y lleno de nulidad absoluta desde su inicio».
«La detención de Saab fue arbitraria a la espalda al derecho internacional público que vicia absolutamente todo el proceso. Estamos en presencia de un juicio que es esencialmente político por la descarada violación a la Convención de Viena. Es un proceso que está afectado políticamente, pues por supuesto los recursos que se encuentran no respetan el derecho, los términos y los lapsos establecidos conforme al derecho procesal y por eso lo han llevado y extendido conforme ellos creen y les parece de acuerdo a los mandatos políticos humano, pero además de eso no lo asisten».
