Venezuela, a través del Sapi participó en la 33 edición de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), en la ciudad de Ginebra en Suiza.
La delegación venezolana estuvo presidida por Francisco Astudillo, Vicepresidente del Comité del Derecho de Patentes del Servicio Autónomo de la Propiedad Intelectual (SAPI).
Astudillo en su intervención, expuso sobre las exenciones a las Patentes del proyecto de Ley de Propiedad Industrial, que está en discusión en la Asamblea Nacional.
Entre otros puntos analizados, conversó sobre el tema de la calidad de las Patentes y su contenido, así como el uso de la inteligencia artificial.
Por su parte, Ricardo Sánchez, Viceministro de Economía Productiva y Director General del SAPI, se pronunció a propósito de la edición número 33 de la OMPI.
Señaló que desde el Sapi se logró restablecer el sistema de Patentes que había estado paralizado por varios años.
A través de Twitter, puntualizó que actualmente se desarrolla un proceso de formación continuo dirigido a los examinadores venezolanos, para alentar su creatividad.
“Venezuela promueve la creatividad a partir del Sistema de Patentes, por ello, la Asamblea Nacional aprobó en primera discusión la Ley de Propiedad Industrial”, dijo.
OMPI
La OMPI es un organismo especializado del Sistema de Naciones Unidas, creado en 1967 con la firma de la Convención de Estocolmo.
A su vez, está dedicada a fomentar el uso y la protección de las obras del intelecto humano. Es uno de los 16 organismos especializados de las Naciones Unidas.
Tiene a su cargo la administración de 26 tratados internacionales que abordan diversos aspectos de la regulación de la propiedad intelectual.
Sapi
Es un organismo adscrito al Ministerio de Comercio, su función es la competencia sobre la propiedad intelectual que le corresponde al Estado Venezolano.
Su rango de acción está orientado a la materia de Derecho de Autor, Marcas y Patentes.
La creación del SAPI, ha permitido unir bajo una misma organización la Propiedad Industrial y el Derecho de Autor.
Esta fusión ha hecho posible agilizar y optimizar el proceso de registro, protección y difusión de las creaciones del intelecto humano.
Las mismas, bajo los diversos esquemas que operan actualmente en el Sistema Venezolano de Propiedad Intelectual.
