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Venezolana se tritura las manos en fábrica clandestina en Perú

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La venezolana Johana Bastidas Terán perdió ambas manos mientras trabajaba en una fábrica clandestina de suela de zapatos ubicada en el distrito de Los Olivos, en Perú.

La mujer de 40 años de edad, denunció que la abogada defensora de la empresa “le puso precio” a sus extremidades superiores.

“Perdí mis dos manos, tanto la derecha como la izquierda. Yo ya no me puedo valer por mí misma, no puedo hacer nada, no puedo trabajar. Mi vida cambió completamente”, relató a ATV Noticias y reseñó Noticias al Día.

La migrante tenía nada más un mes trabajando como obrera en la fábrica y según el medio laboraba casi 12 horas al día; no tenía contrato ni seguro, tampoco contaba con implementos de seguridad industrial.

De acuerdo con la información, el lamentable hecho ocurrió mientras la venezolana manipulaba una máquina inyectora de calzados, en Perú, y sus manos quedaron aplastadas por la prensa durante casi 30 minutos, tiempo en el que trituró todos sus dedos y gran parte de las palmas.

Yenny Bastidas, hermana de la trabajadora agravada, detalló que mi hermana empezó a gritar, al ver cómo sus manos se iban moliendo, cómo sus dedos iban sonando, sus huesos. 25 minutos más o menos quedaron sus manos atrapadas ahí”. 

Por su parte, Johana explicó que cuando apagaron “la máquina ya vemos que está saliendo la sangre, mis dedos triturados, mis huesos sonaban cuando se partían”. 

“Mis manos no tienen precio”

Pese a que fue sometida a cinco operaciones, la venezolana perdió 95% de sus manos  y no puede valerse por sí misma, por lo que exige una reparación civil en Perú.

Ante esto, la abogada de la compañía, Martha Leo, le respondió que “¿Usted sabe cuánto cuesta un muerto, señora, en la Fiscalía? Un muerto, 5.000 soles (1274,70 dólares). Una mano, ¿Cuánto cree que cuesta: 2 mil o 3 mil soles? Por eso le digo. Es mejor que él le pague la indemnización. Acá en el Perú es así.

Por su parte, la afectada aseveró que para mí, mis manos no tienen precio, yo con mis manos trabajaba, yo soy la que mantengo a mis hijas en Venezuela. Tengo dos hijas, cuatro nietos. Yo era su sustento, ahora no puedo seguir trabajando”.

Venezuela News Radio 104.9 FM

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