La Unesco se ofreció para ayudar a restaurar los destrozos causados por radicales bolsonaristas en las sedes de tres poderes en la capital de Brasil.
Así lo informó este lunes la ministra de Cultura, Margareth Menezes en sus redes sociales. Adelantó que la directora de la Unesco en Brasil está a disposición para reparar los estragos de seguidores de Bolsonaro.
«Recibí una llamada de Marlova Noleto, directora y representante de la Unesco en Brasil», quien «se puso a su entera disposición para contribuir con la reforma y la recuperación de las sedes de los tres poderes y de todo lo que fue destrozado».
Nesta segunda-feira (9), a ministra da Cultura @MagaAfroPop e o secretário-executivo @marciotsantos se reuniram com representantes da @UNESCOBrasil e do @IphanGovBr para discutir estratégias de recuperação do Patrimônio Cultural após os atos ocorridos no último domingo. pic.twitter.com/YC9iolwGif
— Ministério da Cultura (@CulturaGovBr) January 10, 2023
Los estragos del fascismo en Brasil
Partidarios del expresidente Jair Bolsonaro invadieron y generaron cuantiosos daños en el interior de los edificios de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Estos edificios tienen un alto valor arquitectónico, pues son proyectos del reconocido arquitecto brasileño Oscar Niemeyer.
Durante cuatro horas y media, esos grupos de extrema derecha vagaron con libertad por el Palacio de Planalto, sede del gobierno, el Congreso Nacional y la Corte Suprema. Dejaron a su paso un montón de destrucción, en un intento frustrado por derrocar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Los seguidores de Bolsonaro destruyeron además una «parte importante» del rico acervo artístico que se encontraba en el interior de esos edificios y en el que figuran pinturas, esculturas y mobiliario de gran valor histórico.
Daños millonarios
Según el Ejecutivo, existen muchos cuadros rasgados o rotos, especialmente fotografías.
Entre las obras vandalizadas en el Palacio de Planalto está la obra «As mulatas», una de las más importantes del artista brasileño Di Cavalcanti. El valor de esta obra se estima en ocho millones de reales, unos 1,5 millones de dólares.
«Es espantoso todo lo que hemos estado viviendo desde los ataques terroristas de este domingo en Brasilia», que «es patrimonio histórico material e inmaterial de Brasil«, manifestó la ministra, quien prometió «trabajar unidos» para «reconstruir todo lo destruido».
