El telescopio espacial James Webb no pierde tiempo en revelar los secretos del universo y en esta oportunidad se trata de otro hecho cósmico asombroso.
Es la primera detección clara de dióxido de carbono en la atmósfera de un mundo distante, es decir un exoplaneta.
El potente telescopio espacial detectó dióxido de carbono en la atmósfera de un planeta a 700 años luz de distancia llamado WASP-39b.
Expertos refieren que WASP-39b es enorme, y tiene una masa similar a la de Saturno, y un diámetro 1,3 veces mayor que el de Júpiter.
Añaden que la órbita es relativamente cercana a su estrella, lo que le da una temperatura promedio de alrededor de 900 grados Celsius.
Los investigadores encontraron que WASP-39b tiene más carbono y oxígeno que su estrella anfitriona, lo que implica que no se formó cuando el gas alrededor de la estrella se derrumbó de una sola vez, sino que su núcleo rocoso se creó primero y luego acrecentó el gas que forma su estrella.
Por consiguiente, los especialistas destacan que los planetas en tránsito como WASP-39b pueden brindar a los investigadores oportunidades para sondear atmósferas planetarias.
«No es un lugar que querrías visitar, pero este es el primer paso hacia la caracterización de las atmósferas de los planetas habitables«, recalcó Eliza Kempton de la Universidad de Maryland (EEUU).
.@NASAWebb has captured the first definitive detection of carbon dioxide in the atmosphere of a planet beyond our solar system.@OxfordPhysics' Associate Prof Vivien Parmentier, who organised the modelling effort in preparation for the analysis, reacts ⬇️https://t.co/5GvVlwBN9h
— University of Oxford (@UniofOxford) August 26, 2022