Este jueves 26 de enero se conoció, a través de las redes sociales, que pasadas las 7 de la noche el pasado 10 de enero un joven habría sido agredido por un motorizado. Este portaba un bolso térmico identificado con el logo de la plataforma de reparto de comida a domicilio Yummy.
Según la cuenta @efrainreporta, el hecho ocurre mientras la víctima cruzaba la avenida Francisco de Miranda, a la altura del Centro Comercial Líder (municipio Sucre, estado Miranda). El motorizado aceleró e intentó atropellarle, porque supuestamente «estaba atravesado».
Cuando el joven se percata, comenzó a grabar con su teléfono celular y el atacante intenta arrebatarle el móvil. Mientras tanto, le decía groserías y exigía amenazante: «Borra el video». Así estuvo durante varios minutos. Al ver que no consigue su objetivo, procedió a propinarle varios golpes.
«Vecinos del sector intentaron persuadir al motorizado para que cesara su amedrentamiento logrando que se fuera del sitio», agrega la cuenta en su narración.
Pasados los minutos, el joven continuó su camino, y rápidamente el motorizado, ya con otros compañeros, continuó su acecho hasta que decide impactarlo con el casco protector y le ocasiona una herida abierta en la frente.
#EnVídeo 📹
▶️ Un motorizado de la empresa de delivery, @yummy_superapp, se vio involucrado en un hecho irregular, tras arrollar y agredir a un peatón a la altura del CC Líder, en Caracas.#VenezuelaNews pic.twitter.com/wFIWshcH4C
— Agencia Venezuela News (@venezuelanewsVN) January 27, 2023
El agredido, que en medio del altercado logró (por el bolso térmico) identificar la empresa de deliveries donde supuestamente labora el hombre, llamó en varias oportunidades para denunciar ocurrido. No obstante, cuando logró comunicación, la respuesta que recibió fue que en la plataforma no trabajaba ningún motorizado con las características descritas.
Luego, el joven introdujo la denuncia en la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) de El Llanito. Allí el motorizado fue identificado y posteriormente citado a dar declaraciones. El caso continúa sin resolver y el agredido exige revisión del caso.