Somalia preocupa sobremanera, al punto de señalar que hasta 43 mil personas murieron a consecuencia de la extrema sequía en el Cuerno de África.
Así lo señala un estudio de la OMS, Unicef y la London School of Hygiene and Tropical Medicine, respecto a la sequía en Somalia.
En consecuencia, la experticia determinó que alrededor de 43.000 personas fallecieron en Somalia en 2022, la mitad de ellas corresponden a niños menores de cinco años.
Según datos, más del 30% de los niños sufren malnutrición aguda y unas dos personas de cada 10.000 mueren al día.
Aunado a ello, el informe precisa que la crisis está «lejos de terminar», con 18.000 a 34.000 muertes más esperadas en los primeros seis meses de este año.
Millones de animales de granja han muerto en la crisis, que se ha visto agravada por el cambio climático, la inestabilidad política y el aumento global de los precios de los alimentos.
Ya el panorama dantesco en Somalia, habría sido advertido por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
ACNUR recalca que la sequía ha obligado a la población a abandonar su hogar para ir en busca de alimento, agua y asistencia.
Desde enero de 2021, una devastadora sequía ha provocado el desplazamiento de un millón de somalíes.
Un hecho que repercute en una hambruna inminente, y se espera que aumente el número de personas forzadas a huir.
Somalia drought may have killed 43,000 last year – UN https://t.co/ZElfHg1Ehd
— BBC Science News (@BBCScienceNews) March 20, 2023