El juez de un tribunal federal de Texas bloqueó la ejecución de un hombre que mató a sus exsuegros, porque a su juicio, al sujeto no lo pueden condenar a muerte por su enfermedad.
Tras 20 años de debate, el juez Robert Pitman tomó la decisión de bloquear la ejecución de Scott Panetti, de 65 años, condenado en 1992. El hombre que asesinó a balazos a sus exsuegros sufre de esquizofrenia.
Así lo afirmó el juez un comunicado, en el que refiere: “es indiscutible que Panetti padece una enfermedad mental grave y sufre esquizofrenia crónica desde hace más de cuarenta años”.
Luego de tres días de audiencia Pitman, también señaló que la enfermedad le impide a Panetti comprender las razones del Estado para ejecutarlo.
“Su ejecución violaría la prohibición de la Octava Enmienda (a la Constitución) de todo castigo cruel e inusual”, añadió.
Esta decisión “impide al estado de Texas vengarse de una persona que sufre una forma profunda y grave de esquizofrenia”, indicó.
En septiembre de 1992, vestido de camuflaje, Panetti irrumpió en la casa de los padres de su exesposa y los mató a tiros. Tomó como rehenes a su esposa y a su hija de tres años durante la noche antes de entregarse a la policía.
Según medios locales, Panetti fue hospitalizado varias veces antes de los asesinatos por alucinaciones y episodios psicóticos.
Organizaciones de defensa como Mental Health America, así como psiquiatras, exjueces, fiscales y grupos religiosos, ayudaron a Panetti en su larga espera por un decisión.
