Las fuerzas militares de Rusia y Belarús iniciaron hoy jueves los ejercicios militares conjuntos «Determinación aliada-2022» en medio del conflicto de Ucrania.
Estas maniobras militares se realizan en territorio bielorruso y se prolongarán por 10 días a partir de este momento. Es importante resaltar que este sería el mayor despliegue militar en Belarús desde la Guerra Fría.
A través de un comunicado, el Ministerio de Defensa de Rusia afirmó que el objetivo de los ejercicios conjuntos es «suprimir y repeler una agresión externa».
En tal sentido, durante las maniobras de Rusia y Belarús se ensayarán operaciones de defensa contra acciones de lucha antiterrorista. Para estos ejercicios se desplegaron sistemas de defensa antiaérea, con un alcance de hasta 400 kilómetros.
Pronunciamiento de Ucrania
En medio del temor de países occidentales de que Rusia planee una escalada en el conflicto de Ucrania, Reino Unido se ha pronunciado de manera férrea. Frente a este conflicto advirtió a Moscú que entrar en guerra con su vecino sería desastroso para Rusia, Ucrania y Europa.
Según declaraciones del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, estas acciones militares han despertado inquietud en la gobierno de Kiev y sus socios occidentales. Los mismos, acusan a Moscú de preparar una invasión a Ucrania.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, denunció que la concentración de soldados rusos en las fronteras de su país era un medio de «presión psicológica».
Asimismo, la Casa Blanca denunció que Rusia ha desplegado ya cinco mil soldados en la frontera entre Ucrania y Belarús. También aseguró que Rusia planea incrementar esa cifra hasta los 30 mil castrenses.
Paralelamente, el ejército de Ucrania comenzó esta semana sus propios ejercicios en todo el territorio. Para lo cual incluyeron el uso de drones de combate turcos y misiles antitanques entregados por el Reino Unido y Estados Unidos.
La viceministra de Defensa de Ucrania, Ganna Malyar, afirmó este miércoles que las tropas concentradas en las fronteras no estaban preparadas para una invasión a su país. Sin embargo, señaló que sirven a Rusia como herramienta de «presión política y chantaje».
El Kremlin defendió este miércoles la envergadura de los ejercicios militares en Belarús, al señalar que ambos países están sometidos a «amenazas sin precedentes».
«Estas no son las primeras maniobras conjuntas que se celebran en Belarús, se celebran periódicamente. Sí, la magnitud puede ser mayor que antes, pero también la situación es mucho más tensa», dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov.