Rusia aseguró que tomó el control de la localidad de Krasnopillya, una región oriental de Donetsk, 28 kilómetros al norte del bastión ucraniano de Sloviansk.
Así lo declaró el Ministerio de Defensa ruso en pleno conflicto en Ucrania y el avance de tropas rusas en dos frentes de ese territorio.
En dicho control por parte de Rusia en esa localidad de Donetsk, más de 50 militares ucranianos, un automóvil y una camioneta quedaron destruidos. Además, continuaron con éxito las operaciones ofensivas derrotando por fuego a las unidades FAU en zonas como:
- Razdolivka.
- Blagodatne.
- Krasnopillya.
Rusia también destruyó un almacén de municiones de artillería de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Durante el día, más de 80 militares ucranianos, tres vehículos blindados de combate, dos automóviles, así como un obús D-30 quedaron destruidos en esta dirección.
El ejército ruso continúa su operación especial sobre la región de Zaporiyia, enclave estratégico por tener la central nuclear más grande de Europa. Rusia se hizo con el control parcial de la región en septiembre de 2022 y lleva desde entonces intentando avanzar.
Mientras tanto, Rusia continúa sus intentos de romper las defensas ucranianas junto a la ciudad de Bajmut, en el este de Ucrania, objetivo prioritario de Moscú desde la retirada en noviembre pasado de sus tropas del territorio de la región de Jersón situado en la margen derecha del río Dniéper.
¿Qué pasa en la zona?
Cabe destacar que ambas naciones europeas están divididas sobre la entrega de tanques al ejército ucraniano.
La posibilidad de que países occidentales puedan comenzar a entregar tanques Leopard 2 a Ucrania en la primavera, probablemente llevará a Rusia y a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) al borde del conflicto directo.
Por su parte, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, no descartó la posibilidad de que su país envíe tanques Leclerc a Ucrania, luego de que Alemania se negara a enviar sus Leopard 2, provocando desacuerdos internos en la OTAN.
La declaración del mandatario francés surge en medio de las presiones que distintos países hicieron al gobierno del canciller alemán Olaf Scholz para reforzar al ejército ucraniano.
