El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este sábado que viajará a China a principios de abril. En ese contexto, llamó a Pekín a «ayudar a presionar a Rusia» para «detener la agresión» a Ucrania y «construir la paz«.
«El hecho de que China se comprometa con los esfuerzos de paz es muy bueno», destacó el presidente francés. Esto, al día siguiente de que China publicara un documento en el que propuso una solución política del conflicto en Ucrania.
Visita incómoda
Macron consideró que la paz en Ucrania «solo es posible si incluye el fin de la agresión rusa, la retirada de las tropas y el respeto a la soberanía territorial y del pueblo ucraniano».
El presidente francés pidió a China que «no entregue armas a Rusia». Además, «que no utilice nunca armas químicas ni nucleares, y que detenga esta agresión antes de una negociación«.
Las peticiones de Macron a China surgen cuando la nación asiática busca desde hace días jugar un papel de mediador en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
En su documento de 12 puntos publicado el viernes, en el primer aniversario del inicio del conflicto en Ucrania. China se opone claramente a todo uso de las armas nucleares.
Por otro lado, las autoridades chinas anunciaron este sábado la visita el 28 de febrero del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko.
Socio estratégico de Moscú, China se abstuvo el jueves en la votación de una resolución de la Asamblea General de la ONU que exigía una retirada «inmediata» de las tropas rusas.