El precio de la gasolina en Estados Unidos ha fluctuado con tendencia al alza en los últimos meses. Antes de verano, cuando se prevé que el precio de combustible se eleve por la temporada de viajes, los precios estaban por encima de 5 y 6 dólares por galón en muchos lugares de EE.UU., reporto CNBC en marzo.
Al mes de septiembre esa variación con tendencia al aumento se mantiene. Hasta este miércoles en el California el precio de la gasolina era de 6 dólares por galón. Hoy, según la American Automobile Association, el precio es de 5,792. En Washington y nevada está por encima de 5 dólares. Mientras que Montana, Idaho, Oregon, Utha, el preció se sitúa en más de 4 dólares.
El detonante del aumento del precio de la gasolina en Estados Unidos es el aumento en los precios del petróleo. A su vez, el alza en los precios del crudo está vinculado con los recortes de la oferta de petróleo en Arabia Saudita y Rusia, junto a las mortales inundaciones en Libia.
De acuerdo con CNN, este viernes el costo del petróleo alcanzó su nivel máximo en 10 meses. Se aproximaría a registrar su mayor incremento desde que se desató el conflicto entre Ucrania y Rusia.
El panorama posible
Para la economía estadounidense, esto podría traducirse en una mayor inflación y el aumento de la posibilidad de más subidas de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Asimismo, el alza en los precios de la gasolina podría conllevar a que los consumidores hagan menos gastos en zonas distantes a su círculo habitual, lo que daría lugar a una mayor recesión.
Ese sería el panorama para Estados Unidos. Al parecer, la caída de los precios del barril de petróleo Brent no cambiaría demasiado este contexto. Ese tipo de crudo baja un 0,91 %, hasta llegar a 93,48 dólares.
Ante esto, el Sistema de la Reserva Federal mantuvo estables las tasas de interés. Sin embargo, endureció su postura; con lo que proyecta un nuevo aumento de tasas para fin de año y una política monetaria significativamente estricta hasta el 2024.