El régimen Talibán, no sólo retomó el poder en Afganistán, sino que también trajo consigo una nueva escalada de violencia contra los derechos humanos de mujeres y niñas en país asiático.
Según denuncian relatores de la Organización de Naciones Unidas, se está institucionalizando la discriminación y la violencia de género contra mujeres y niñas en Afganistán.
La advertencia lanzada en agosto de 2021 por la ONU, viene a raíz de implementarse una serie de medidas restrictivas, en particular las relativas a las mujeres y las niñas, desde el regreso al poder de los talibanes 20 años después.
Entre los vejámenes a los cuales están sometidas las mujeres y niñas afganas, destacan la prohibición del regreso de éstas a sus puestos de trabajo.
Además de la exigencia de que un familiar masculino las acompañe en los espacios públicos; y por si fuera poco la prohibición de usar solas el transporte público y la imposición de un estricto código de vestir.
Indican los expertos de la ONU, que existen otros casos a considerar, especialmente ligados a mujeres pertenecientes a minorías étnicas, religiosas o lingüísticas.
En su alerta mencionan las diferencias o visibilidad, emprendida contra las féminas de las comunidades hazaras, tayikas, hindúes y otras que hacen vida en Afganistán.
Los talibanes están haciendo desaparecer a las mujeres y las niñas de la vida pública de #Afganistán, alertan relatores de la ONU que piden a la comunidad internacional que hagan rendir cuentas a las autoridades de facto.https://t.co/7bJoDNzV5N
— Noticias ONU (@NoticiasONU) January 18, 2022
Respuesta humanitaria con restricciones
Igualmente sostienen que deben intensificarse las campañas de ayuda humanitaria por parte de la comunidad internacional hacia el pueblo afgano.
Acotan que es necesario poner freno a esta escalada de discriminación y violencia de género; sobre todo que se eliminen de manera inmediata cualquier tipo de restricciones a los derechos fundamentales de las mujeres y las niñas de ese país.
Particularmente, cuando existe una gran inquietud ante los reportes de ejecuciones extrajudiciales y desplazamientos forzosos de minorías étnicas y religiosas promovidos por los talibanes.
Incluso no cuentan con fiscalía especializada, ni tribunales encargados para aplicar la Ley de Eliminación de la Violencia contra la Mujer de 2009.