Los microplásticos que flotan en los ríos europeos pueden acumularse en partes del océano Ártico. Además en los mares nórdicos y la bahía de Baffin.
Según un estudio publicado en Scientific Reports, las investigaciones anteriores han señalado la presencia de altas concentraciones de partículas microplásticas en todo el Ártico. Sin embargo, su origen y dónde se acumulan no estaba claro.
Los investigadores compararon los resultados de sus modelos con la distribución de microplásticos flotantes a través de 121 muestras de agua de mar. Las muestras se recogieron en 17 lugares de la costa occidental de Noruega entre mayo de 2017 y agosto de 2018.
El 30% de los microplásticos en los ríos europeos derivaron a lo largo de la costa noruega para desplazarse hacia el sur a través del estrecho de Fram, refiere EFE.
Pruebas en los ríos europeos
Tras 20 años de simulaciones, el equipo pudo verificar zonas claras donde los microplásticos flotantes se acumulaban en los ríos europeos.
En específico en los mares nórdicos, la cuenca de Nansen (océano Ártico) y el mar de Barents. Además en el mar de Laptev, así como en la bahía de Baffin (entre Groenlandia y Canadá).
Esto indica, según el estudio, que los microplásticos flotantes pueden haber estado circulando por el Ártico durante, al menos, diez años.
Los autores sugieren que la circulación de microplásticos flotantes podría tener consecuencias para la salud de los ecosistemas del Ártico y destacan que los resultados de su estudio ponen de relieve la importancia de una mejor gestión de los residuos plásticos.