Cuando se habla de los mejores equipos de la NBA en su historia, generalmente se nombra a los Boston Celtics, Los Ángeles Lakers o los Bulls de Chicago. Junto con estos nombres, de ahora en adelante se tendrá que colocar el de los Warriors de Golden State.
6 finales en los últimos 4 años, 4 títulos conseguidos en ese período, un estilo de juego que revolucionó la NBA y una base de jugadores que se mantiene intacta. El equipo de la ciudad de San Francisco está entre los mejores de la historia.
De la mano de Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green este equipo sorprendió a todos en la presente temporada para llevarse el título. Golden State Warriors contó con la dirección de Stever Kerr quien sumó su 9no título de la NBA.
Tras dos temporadas sin poder clasificar a la postemporada producto de las lesiones de sus estrellas (Curry y Thompson). Los Warriors supieron reconstruirse y tener la paciencia suficiente para esperar la recuperación de sus jugadores.
La adición, y el cambio de actitud, del canadiense Andrew Wiggins fue factor fundamental en este título. Llamado a ser una super estrella, Wiggins fue pasando por varios clubes sin dejar su huella.
Hasta que llegó a Golden State y cambió su mentalidad. Ésto junto a las temporadas de Jordan Poole, Kevon Looney y Gary Payton II produjo una nueva versión de los Golden State Warriors.
Mención aparte merece el trío fantástico del club: Curry, Thompson, Green. Se habla mucho de su ofensiva (producto de los lanzamientos de 3 puntos), pero muy poco de su gran defensa.
Con Steve Kerr como DT y una base que no se va a modificar en los próximos años, no es descabellado pensar que los Golden State Warriors puedan seguir sumando títulos a sus vitrinas.