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Reguladores de seguridad alimentaria en Estados Unidos y Canadá investigan un brote de hepatitis A potencialmente relacionado con fresas orgánicas contaminadas.
Según agencias de información, las fresas enfermaron a 17 personas en Estados Unidos y 10 en Canadá.
En ese sentido, hubo registros de quince casos de hepatitis A en California, uno en Minnesota y otro en Dakota del Norte. Así lo informó la Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos.
Tras ese brote, doce de los enfermos fueron hospitalizados, dijo la FDA sin dar más detalles.
«Las personas que compraron fresas frescas y luego las congelaron para su consumo posterior no deben comerlas. Deben desecharse».
Por su parte, la Agencia de Salud Pública de Canadá y la Agencia Canadiense de Inspección de Alimentos dijeron que estaban investigando casos en las provincias canadienses de Alberta y Saskatchewan.
Las fresas orgánicas importadas se compraron entre el 5 y el 9 de marzo y ya no están disponibles para su compra en Canadá, aseguraron.
«Según los hallazgos de la investigación hasta la fecha, el consumo de fresas orgánicas frescas importadas es la fuente probable del brote», dijeron las agencias en un comunicado.
