El duque y la duquesa de Sussex recibieron la petición de desocupar Frogmore Cottage, la residencia oficial de la pareja en el Reino Unido.
Así lo informó el portavoz de la pareja a medios internacionales este miércoles.
«Podemos confirmar que el duque y la duquesa de Sussex recibieron la petición de desocupar su residencia en Frogmore Cottage», dijo el portavoz.
La declaración se produjo después de que el diario británico The Sun publicara una noticia en la que se afirmaba que la pareja iba a ser desalojada de la residencia, que es propiedad de Crown Estate, y que desde entonces había sido ofrecida al príncipe Andrew, uno de los hermanos del rey Charles III.
Según The Sun, se habría pedido a la pareja que abandonara la propiedad días después del lanzamiento de «Spare», las memorias de Harry, en enero.
El miembro de la realeza, de 38 años, confirmó la percepción pública de que era el príncipe fiestero, despreocupado y amante de la diversión. Detalló el devastador impacto de la muerte de su madre, su experimentación con las drogas como método para sobrellevar el dolor y sus dificultades para encontrar el amor.
El Palacio de Buckingham declinó en repetidas ocasiones hacer comentarios sobre las memorias.
Mientras tanto
El príncipe Harry y Meghan residen actualmente en Estados Unidos. Sin embargo, habían conservado esta propiedad de principios del siglo XIX como su sede en el Reino Unido.
La casa está situada en un rincón de la finca de Windsor, al oeste de Londres y la difunta reina Isabel II se la regaló a los Sussex.
La polémica en torno
Los duques de Sussex renovaron esta propiedad en Reino Unido y se mudaron poco antes de la llegada de su hijo Archie en mayo de 2019. Sin embargo, la renovación generó polémica después de que la pareja se apartara de la vida pública y saliera a la luz que se habían utilizado 2,4 millones de libras del dinero de los contribuyentes británicos en la remodelación de la casa de campo.
Desde entonces han devuelto el dinero público tras su traslado a California.
Las obras incluyeron las siguientes remodelaciones:
- Eliminación de una chimenea.
- El reacabado del tejado.
- Nuevas escaleras.
- Instalaciones de chimeneas.
- Un nuevo suelo de madera «flotante».
Así lo detallaron documentos de solicitud de planificación al ayuntamiento local. El duque y la duquesa pagaron de forma privada el coste de todos los accesorios, instalaciones y mobiliario.
