Este lunes, un terremoto de magnitud 6.8 sacudió la provincia china de Sichuan, en el suroeste del país. Hasta ahora se reportan más de 20 fallecidos.
Según el Centro de Redes Sismológicas de China, el temblor ocurrió a una profundidad de 16 kilómetros. Su epicentro fue en el condado de Luding, a unos 200 kilómetros de la capital de la provincia de Sichuan.
Un terremoto de magnitud 6 impide que los afectados permanezcan de forma estable durante el sismo. Además, genera grietas en las paredes y la caída de tejas y chimeneas, según la escala utilizada por las autoridades sismológicas de China.
La ciudad de Ya’an informó sobre 14 muertos en su cantón rural de Shimian, cercano al epicentro, según la televisión pública CCTV. Estas víctimas se suman a los siete muertos anunciados horas antes por la prefectura vecina de Garze, que administra el cantón de Luding. Por el momento, se registran en total 21 fallecidos.
En las últimas semanas, Sichuan se ha visto golpeada además por una ola de calor de una intensidad inédita en décadas, una sequía que provocó cortes de suministro eléctrico en algunas zonas, incendios y rebrotes de covid-19 que han desembocado en el confinamiento de su capital desde el viernes pasado.
La provincia de Sichuan se encuentra en una zona con frecuente actividad sísmica y fue el escenario de un catastrófico sismo en mayo de 2008, de una magnitud de 8 grados y que dejó más de 90 mil muertos y cientos de desaparecidos.
