En Argentina, miles de personas rechazaron el polémico homenaje propuesto por la candidata a vicepresidenta Victoria Villarruel, para reivindicar la dictadura militar y genocida. El rechazo surge en plena campaña electoral y cuando la Nación se encamina a cumplir 40 años de democracia.
El acto organizado por Villarruel en la Legislatura de Buenos Aires estuvo masivamente rechazado por organismos de derechos humanos. Acusaron a la candidata libertaria de pretender negar la verdad del sangriento régimen militar.
También de reinstalar la “teoría de los dos demonios”, tratando de equiparar la violencia de los grupos guerrilleros con el terrorismo de Estado.
Los organismos humanitarios y las agrupaciones políticas de izquierda también acusaron a Villarruel de generar una “provocación” en plena campaña para las presidenciales de octubre.
Sobre el “homenaje”
El acto homenajeó a las víctimas de la guerrilla en los años que precedieron al 24 de marzo de 1976, cuando se inauguró la dictadura cívico-militar en Argentina. Dictadura que en siete años dejó unas 30.000 personas desaparecidas, según organismos de derechos humanos.
El “homenaje” a “víctimas” de las guerrillas de izquierda en la década de 1970 en Argentina reabrió el debate por la violencia armada y su confrontación con la última dictadura militar (1976-1983).
Lo convocó Villarruel, que encabeza la fórmula de Javier Milei, la más votada en las primarias de agosto. Reclama que se juzguen actos terroristas impunes perpetrados por las guerrillas del Ejército Revolucionario del Pueblo y Montoneros.
Ambas organizaciones operaron durante la década de 1970 y fueron blanco del terrorismo de Estado ejercido por la dictadura militar, cuyos responsables sí han sido juzgados y condenados por delitos de lesa humanidad.
