La adolescente había huido de Venezuela a Perú con su novio Greyver Pacheco Veroes, después de que sus padres no aceptaran el noviazgo porque la menor era víctima de violencia física.
Sin embargo los tratos violentos no desaparecieron, pues Diosangela Anaís Cabriles Valles de 15 años de edad fue asesinada por su pareja en el Distrito de Ate, Perú.
En 2021, la pareja decidió huir al país andino, pero la joven nunca perdió el contacto con su familia. Allegados relataron que Cabriles se fue del apartamento donde vivían tras terminar su relación, pero sin embargo Pacheco se negaba a dejarla.
Familiares de la víctima, aseguran que Greyver Pacheco era posesivo con Diosangela, tenía celos enfermizos y no la dejaba salir, incluso la vigilaba cuando estaba en el trabajo, quien se desarrollaba como manicurista en Perú.
En un intento de arreglar la «relación» la adolescente entró en contacto con el agresor. En esa oportunidad Greyver Pacheco intentó convencer a la adolescente, pero en una discusión dentro de su inmueble la estranguló.
Tras el atroz asesinato registrado el primero de octubre, el feminicida durmió con el cadáver de Diosangela y luego la arrojó en una zona deshabitada de Ate.
Los vecinos del distrito pensaban que se trataba de algún animal muerto por el fuerte olor que desprendía el cuerpo de la adolescente asesinada.
Búsqueda de Diosangela
Amarilys Cabriles, madre de Diosangela, denunció la desaparición de su hija el 11 de diciembre del 2022 en la comisaria de Ate y en diarios de Venezuela. Pues ya habían pasado más de dos meses sin comunicarse con su hija.
La madre de la víctima llegó al Perú e ingresó al departamento donde vivía la menor con su pareja, pero no había ni una prenda de Diosangela y todo estaba ordenado. A lo que Greyver Pacheco alegaba que la adolescente lo había abandonado hace varios meses.
Sin embargo Amarilys siguió insistiendo ante la policía local y tras un minucioso trabajo de inteligencia se logró ubicar el cuerpo de la adolescente Diosangela en la morgue. Estaba como persona no identificada, pero algunos rasgos llevaron a determinar que se trataba de ella.
El cuerpo de la adolescente Diosangela Cabriles, llevaba una chaqueta, una camisa y un short que le pertenecían a su asesino Greiver Pacheco.
De manera inmediata la policía de Perú, fue en búsqueda de Pacheco quien se encontraba detenido en el penal de Lurigancho por el delito de receptación (adquirir, recibir, guardar, esconder, vender un bien de procedencia delictuosa).
Allí interrogaron a Pacheco, quien finalmente confesó su delito, narrando que discutieron y como ella no quería regresar con él, la estranguló con sus manos. Pero, sin embargo, el cuerpo tenía un pasador en el cuello lo que indica que la habría ahorcado con un cordón.
Tras el esclarecimiento, la madre de la adolescente exige justicia para que Pacheco sea condenado por el delito de feminicidio. Asimismo Amarilys solicita ayuda para costear el traslado del cuerpo de su hija hasta Venezuela.