Un joven venezolano el pasado 12 de agosto fue raptado por un grupo armado en una zona rural de Cúcuta, Colombia, fue hallado muerto.
Víctor Anastasio Mendoza, como era su nombre, se dedicaba a labores del campo en La Fría, estado Táchira.
El padre del joven de 26 años hizo la identificación del cuerpo, quien lo reconoció por varios tatuajes que tenía en su cuerpo. Además, algunas cicatrices de bala tras quedar en medio de un fuego cruzado entre la Guerrilla y el ELN hace un tiempo.
Según reseña Noticia al Día, la familia del venezolano espera que desde Venezuela les envíen un documento que conste que las huellas dactilares del cuerpo pertenecen a Mendoza, para recibirlo y darle el último adiós.
Los tatuajes que tenía el joven estaban en su antebrazo derecho con el nombre Teresa. Igualmente, tenía otro dibujo que decía “Familia, llevo conmigo el ejemplo de mi madre de amor y de mi padre y la compañía de mis hermanos”.
Asimismo, en el antebrazo izquierdo tenía tatuado el nombre Kelly. Además, de acuerdo a los familiares, el venezolano que hallaron muerto tenía las marcas de un disparo en la pierna izquierda, de hace dos años, cuando recibió un tiro en Banco de Arena, zona rural de Cúcuta.
“Él nos contó que estaba en Banco de Arena cuando hubo un enfrentamiento entre guerrilla y paramilitares. Él se agachó para no ser alcanzado por una de las balas, pero le pegaron el tiro”, recordó un familiar.