Donald Trump atacó a la administración del presidente Joe Biden, al criticar su política energética. Según el expresidente republicano, Biden conduce a Estados Unidos (EEUU) al “fracaso” y a depender totalmente del petróleo de otros países.
Así lo declaró Donald Trump durante su intervención en un acto llevado a cabo en Wisconsin, para hacer campaña a favor de algunos candidatos republicanos.
“Somos una nación que tiene mayores costes energéticos en la historia. Ya no somos independientes ni dominantes energéticamente como hace dos años. Somos una nación que mendiga petróleo a Venezuela, Arabia Saudita y muchos otros. ‘Por favor, por favor, por favor, ayúdenos’, dice.
Asimismo, Trump condenó las estadísticas económicas que auguran una crisis en el país norteamericano, asegurando que “son una nación en declive que está fracasando”.
Señaló que actualmente Estados Unidos posee la mayor tasa de inflación de los últimos 40 años. Además, el mercado bursátil “acaba de terminar la peor mitad del año desde 1870”.
EEUU en aprietos
Estados Unidos embargó al petróleo ruso debido a la operación militar especial en Ucrania. Desde ese entonces, sufre las consecuencias de un alza de precios de la gasolina, alcanzado un récord histórico en el mes de junio de 5,016 dólares por término medio el galón.
No obstante, el índice a nivel nacional está actualmente en 4,084 dólares por unidad, pero con la amenaza de crisis todavía vigente.
Para hacer frente a este escenario, Washington adoptó algunas medidas, como la de mayo cuando autorizó a las petroleras estadounidenses y europeas para que “negocien y reinicien operaciones” con Venezuela, luego de años de sanciones contra el país.
Además, el mes de julio, durante la visita de Biden a Arabia Saudita, anunciaron el incremento de la capacidad de producción diaria de petróleo hasta 13 millones de barriles previsto hasta 2027.
Recesión económica a la puerta
Por su parte, la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio, precisó que el Producto Interno Bruto (PIB) del país se contrajo un 0,2% en el segundo trimestre del año en comparación a los tres meses anteriores, constituyendo técnicamente un indicador informal de recesión económica.
