El cambio climático expone al Canal de Panamá a una sequía sin precedentes que dejó casi 200 embarcaciones atrapadas debido a que autoridades marítimas acortaron límites de acceso a esta vía fluvial.
Bajo esta emergencia, alrededor de 36 navíos en total están autorizadas a pasar diariamente en esta época del año bajo condiciones climáticas regulares. No obstante, el miércoles, la Autoridad del Canal de Panamá notificó que extenderán al 2 de septiembre las limitaciones.
Asimismo, bajo las restricciones actuales, las embarcaciones no pueden exceder un calado máximo de 44 pies (13,41 metros). En ese contexto, los propietarios de barcos deben transportar menos carga o cambiar a rutas alternativas que pueden hacer más extensos y costosos los viajes.
Los estragos de El Niño
El fenómeno meteorológico El Niño, sumado a un aumento de las temperaturas del mar, contribuye a la sequía en la nación y afecta directamente al canal de Panamá.
Expertos advierten que los déficits de lluvia en el quinto país más húmedo del orbe muestran como los riesgos climáticos afectan a la industria del transporte marítimo. Específicamente, al canal por donde transita cerca de 3% del comercio mundial.
Las mediciones de lluvia alrededor del área están entre un 30 y un 50 % por debajo de lo normal. Esto, según datos del Instituto Smithsoniano de Investigaciones Tropicales (STRI).
El lago Gatún está en niveles muy bajos y de éste depende el complejo sistema de esclusas, que utiliza agua dulce. Este permite que grandes cargueros puedan cruzar esta vía interoceánica.
Este embalse representa además una fuente de agua crucial para más del 50 % de la población de Panamá, dijo la propia Autoridad del Canal (ACP).
