Tal vez no has escuchado hablar de los obesógenos, porque es un término poco conocido, pero son sustancias químicas presentes en el ambiente que pueden tener un papel importante en el desarrollo de sobrepeso u obesidad en la población.
Estos compuestos producen un aumento de la masa del tejido adiposo blanco o masa grasa solo con exponernos a ellos a través de la ingesta (dieta), por contacto o mediante inhalación de aire contaminado.
La obesidad es una epidemia mundial que afecta a millones de personas en todo el mundo. Los factores que contribuyen con este padecimiento son bien conocidos, como la dieta poco saludable, la falta de actividad física y los factores genéticos. Sin embargo, un factor menos conocido que también puede contribuir a la obesidad son las sustancias químicas obesógenas.
¿Qué son los obesógenos?
Los obesógenos son sustancias químicas que promueven el aumento de peso. Se encuentran en una amplia variedad de productos, como alimentos, plásticos, cosméticos y productos de limpieza. Los obesógenos pueden actuar de varias maneras, incluyendo:
- Favorecer la acumulación de grasa en el cuerpo.
- Alterar el metabolismo y la función hormonal.
- Inflamar las células.
¿Cómo nos afectan?
La exposición a las sustancias químicas de los obesógenos puede aumentar el riesgo de obesidad y otras enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2, las enfermedades cardíacas y el cáncer.
¿Cómo podemos evitar la exposición a estas sustancias?
Hay algunas cosas que podemos hacer para reducir la exposición a obesógenos:
- Limitar el consumo de alimentos procesados y envasados.
- Elegir productos libres de BPA, ftalatos y otras sustancias químicas obesógenas.
- Reducir el uso de plásticos y productos de limpieza.
- Comer alimentos frescos y cocinados en casa.
Investigación sobre obesógenos
La investigación sobre obesógenos está en curso. Los científicos están trabajando para comprender mejor cómo funcionan y cómo pueden afectar a la salud humana.
