Aunque la administración de Joe Biden y Colombia, se comprometieron a emplear medidas para detener el “movimiento ilícito” de personas por el Darién, el paso de migrantes por la selva fronteriza entre Colombia y Panamá, aumentó.
El Tapón del Darién es la única vía terrestre para llegar a Estados Unidos desde América del Sur. Si bien cruzar este trecho representa un gran peligro, las ganancias que deja esa cruzada son difíciles de ignorar por parte de “emprendedores que persiguen la bonanza migrante“, como indica Julie Turkewitz, en su trabajo “Una economía bonita”: la industria migratoria del Darién es un lucrativo negocio.
La periodista señala en su informe que los referidos “emprendedores” no son contrabandistas clandestinos que se esconden de las autoridades. De hecho, explica, que suelen ser personalidades reconocidas en el ámbito político, empresarios destacados y líderes electos, los que por unos millones de dólares envían diariamente personas hacia EEUU.
¿Cuánto cuesta la travesía por el Darién?
Para algunos desafortunados, cuesta la vida. Pues, la ruta de la selva es peligrosa, y los migrantes suelen ser víctima de robos, secuestros e incluso de las hostilidades de la naturaleza.
No obstante, Turkewitz recogió los costos del trayecto por el Darién. Por ejemplo, llegar hasta el bosque tropical en lancha tiene un valor aproximado de 40 dólares. El pago del guía por la ruta rodea los 170 dólares.
Alquilar una hamaca toda la noche, puede llegar a costar 10 dólares. Las personas que se encargan de llevar la mochila de los migrantes cobran alrededor de 100 dólares. Un plato de pollo con arroz tras un largo día de esfuerzos: 10 dólares.
En conclusión, los paquetes especiales con todo incluido (tiendas, botas y otros básicos), puede costar aproximadamente 500 dólares, o más.
¿Quiénes se lucran?
Autoridades municipales de ambos lados de la frontera, así lo explica en su reportaje la periodista Turkewitz.
“Hemos organizado todo. Los lancheros, los guías, los cargabolsos”, dijo Darwin García, miembro electo de una junta de acción comunal y exconcejal de Acandí, un municipio colombiano en donde empieza la selva.
Entretanto, el hermano menor de García, Luis Fernando Martínez, defiende el negocio de la migración como “una industria rentable” en una localidad que antes “no tenía vocación económica“. Martínez es líder de una asociación local de turismo y candidato a la alcaldía de Acandí.
Por su parte el exconcejal del municipio colombiano de Necoclí, Fredy Marín, señaló que “hay una economía bonita”. Marín maneja una empresa de lanchas que transporta migrantes en su trayecto a EEUU.
Resaltó que cobra 40 dólares por personas y mensualmente, son miles los migrantes que traslada. En ese sentido, Marín subrayó que “lo que primero era una problemática, se ha convertido en una oportunidad”.
¿Qué se ha hecho?
EEUU, Colombia y Panamá, el triángulo de países “afectados” por la crisis migratoria del Darién, firmó un acuerdo en abril para detener el paso de migrantes por la selva.
No obstante, más de 360 mil personas realizaron la travesía este 2023, entre esas 40 mil niños. Según el gobierno de Panamá, superó el récord de 250 mil del año pasado.
Aunque algunos diplomáticos estadounidenses visitaron la región en meses recientes, funcionarios de la Casa Blanca dicen que “consideran que el gobierno colombiano está cumpliendo con su compromiso de combatir la migración ilícita“, refiere Turkewitz.
Sin embargo, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en días pasados señaló que la única forma de solucionar la crisis migratoria, en el caso de Venezuela, es levantar las sanciones económicas contra el país.
El mandatario colombiano, expresó que no era su meta detener la migración por el Darién. Argumentó, que la migración a través de esta ruta es “producto de medidas contra pueblos latinoamericanos mal tomadas”, en especial de EEUU.