Este martes el gobierno de México señaló a la marca francesa Sézane por hacer «uso indebido de la imagen de mujeres indígenas zapotecas». El Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) informó que iniciará una investigación y emprenderá un recurso jurídico contra la firma europea.
El hecho que ocurrió el pasado sábado en el mercado de Teotitlán del Valle, en el estado de Oaxaca, se viralizó en redes sociales. En Instagram la cuenta Lienzos Extraordinarios posteó un video donde se observa a una mujer de la tercera edad con un suéter verde de la marca francesa mientras los realizadores de la campaña la fotografían. En paralelo también la hacen bailar ante las cámaras.
El perfil denunció que la firma se aprovechó de la ingenuidad de esta mujer. Según los administradores de la cuenta le ofreció 200 pesos, equivalente a 10 dólares, para que prestara su imagen.
«Espero que a la señora que hacen bailar le hayan contado los millones de pesos que van a ganar extrayendo capital cultural«, expresaron en otra publicación.
Tras conocer el caso, el INPI emitió un comunicado en su página web. Desde allí «condena enérgicamente el uso y explotación de la imagen de personas indígenas« por parte de la marca francesa.
Según el texto, el ente junto a las autoridades de Teotitlán del Valle y las personas agraviadas dará inicio a una investigación «para actuar de conformidad con la ley».
En representación del gobierno mexicano el INPI «hace un firme llamado a marcas y empresas privadas, a que cesen de explotar a los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas como capital cultural».
En el documento el órgano hace alusión al artículo 2 de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
“Los pueblos y las personas indígenas son libres e iguales a todos los demás pueblos y personas. Tienen derecho a no ser objeto de ningún tipo de discriminación en el ejercicio de sus derechos, en particular la fundada en su origen o identidad indígenas”.
El ente gubernamental recordó que los pueblos originarios no son objetos de indumentaria, sino sujetos de derecho público. En ese sentido recordó el amplio patrimonio cultural y conocimientos tradicionales que poseen estas comunidades.