Una nueva tendencia de “transespecie” llegó a Alemania. Una multitud de jóvenes que se identifican como perros se manifestaron en Berlín para exigir ser reconocidos como tal.
Cientos de personas se congregaron cerca de la estación de tren de Potsamer Platz, en Berlín. Desde allí protestaron a favor de su reconocimiento público y oficial, comunicándose únicamente con aullidos y ladridos. Incluso muchos de ellos adoptaron la posición y la actitud habitual de los caninos.
Sorprendentemente fue una manifestación multitudinaria, a diferencia de otras similares realizadas en otros países. La manifestación se hizo rápidamente viral en las redes sociales, despertando diferentes reacciones.
¿Una nueva tendencia?
La particularidad de la exigencia promovió la controversia sobre distintos temas. En las redes sociales se puede ver un creciente debate acerca de la identidad de género y la salud mental de los manifestantes.
En marzo de este año se vivió una protesta similar en Polonia. Un grupo menor de personas exigió ladrando a las autoridades ser reconocidos oficialmente como perros.
Otro caso bastante particular es el de un hombre que quiso cumplir su sueño de ser perro, y lo hizo. Se trata de un japonés que gastó más de €12 mil en su disfraz hiperrealista de collie hecho a su medida.
Este hombre o perro se conoce simplemente como “Toco” y ganó una gran cantidad de seguidores en internet. En su canal en Youtube cuenta con más de 56 mil suscriptores y en su perfil de Tik Tok tiene más de 267 mil seguidores.
En una entrevista, Toco reveló que muchas personas le han compartido su deseo de hacer lo mismo.
Esta no es la primera vez que una persona intenta transformarse en un animal de una forma muy realista.
Tom Peters es un británico que de igual forma, se identificó como dálmata. También Toru Ueda, un ingeniero de Tokio que gastó más de $20 mil en un traje de lobo hecho a medida.
Todos ellos destacan la sensación de liberarse de los problemas humanos al convertirse en animal. Señalan una libertad sobre las relaciones humanas, problemas con el trabajo y otros de los que se olvidan al ponerse el traje.