Juan Carlos Tanus, director de la Asociación Civil Colombianos en Venezuela, consideró que el gobierno de Estados Unidos “volvió a equivocarse” con el secuestro del diplomático Alex Saab, porque ha tenido “un alto costo político” y más temprano que tarde tendrá que recapacitar. Así lo consideró el activista por los derechos humanos en entrevista concedida en exclusiva a la agencia Venezuela News.
A su juicio, “la opinión internacional tiene claro lo que está haciendo EEUU”, que “no solo es la violación de los acuerdos internacionales”.
“Vinculan Alex Saab y Colombia porque necesitan seguir ganando miedo y generando choque (…) Se asocia además con quienes no pudieron seguir haciendo operaciones económicas con Venezuela desde Colombia, se volvieron una contraparte. Además que el uribismo ha sabido maniobrar con este secuestro”, adicionó Juan Carlos Tanus. Esto en alusión a que el enviado especial salió a relucir en plena campaña de forma malsana.
Agregó: “Los grandes medios tienen periodistas concentrados (en el caso) y cada vez sacan refritos porque lo necesitan”.
“Quiero aprovechar para enviar la solidaridad de las colombianas y colombianos en territorio venezolano a nuestro hermano y amigo Alex Saab. Decirle que estamos con él y que vamos a estar hasta el final, cuando se consiga la libertad, porque Estados Unidos tiene que recapacitar frente a esto que están haciendo. Además, es un clamor del pueblo colombiano en territorio venezolano”, expresó enfático.
El director de la Asociación de Colombianos en Venezuela, @JUANCARLOSTANU3 envió en nombre del pueblo colombiano un saludo en solidaridad y apoyo al diplomático venezolano Alex Saab. #VenezuelaNews 🇻🇪 pic.twitter.com/q6EX0weNPm
— Agencia Venezuela News (@Agencia_VN) May 16, 2022
A juicio de Juan Carlos Tanus, Alex Saab “ha trabajado en función de generar procesos de bienestar. Y de consolidar los procesos económicos en armonía entre ambos pueblos”.
Este lunes, Alex Saab cumple 7 meses de secuestro en la ciudad de Miami, estado de Florida, luego de que el pasado 16 de octubre fue extraído de Cabo Verde, donde fue sometido a múltiples torturas físicas y psicológicas.
