Este martes, una compañía subsidiaria de Johnson & Johnson fue duramente criticada tras intentar utilizar una artimaña legal y zafarse de las miles de demandas presentadas contra esta farmacéutica estadounidense por el aparente uso de sustancias nocivas y cancerígenas en sus productos.
Se trata de la subsidiaria, LTL Management. Sobre esta empresa, propiedad de Johnson & Johnson, pesan alrededor de 38 mil demandas por el uso de sustancias cancerígenas.
Por ello la compañía ha alegado estar en bancarrota y considera conveniente llegar a una “resolución equitativa, eficaz y consensuada”.
En términos legales esta maniobra conocida como “quiebra tejana de dos pasos” y la utilizan varias empresas. Sobre todo cuando se ven asfixiadas por litigios, pues desvía cualquier obligación de pago por acciones jurídicas.
Actualmente esta subsidiaria de Johnson & Johnson que posee un valor superior a los 430 mil millones de dólares, sostiene que sus productos de talco no tienen sustancias cancerígenas. Al contrario asegura que son seguros para el consumidor. Ahora tras declararse en quiebra todos los litigios podrían quedar suspendidos hasta que se resuelva su situación de bancarrota.
Por su parte el juez Michael Kaplan de Nueva Jersey programó un juicio para evaluar la petición de los demandantes y así desestimar el caso de quiebra.