El presidente estadounidense, Joe Biden culpó a Rusia de ser la responsable de la inflación que hay en Estados Unidos por el aumento en los precios de los combustibles.
«Un gran contribuyente a la inflación este mes fue un aumento en los precios del gas y la energía, a medida que los mercados reaccionaron a las acciones agresivas de Putin».
Así lo publicó el presidente este jueves en su cuenta de Twitter.
Ante esa situación, Biden prometió tomar medidas para aliviar los daños de la población.
«Sé que los precios más altos afectan el presupuesto de una familia, por eso lucho para reducir los precios cotidianos que están exprimiendo a los estadounidenses».
Previamente, Biden explicó los métodos que planea utilizar para alcanzar ese objetivo. Entre otros, incluyen la liberación de 60 millones de barriles de petróleo de las reservas estratégicas.
También contempla el aumento de inversiones en la industria estadounidense y la promoción de la competencia en el mercado local.
Asimismo, resaltó que aboga por un «plan para reducir el costo de los productos esenciales como los medicamentos recetados y la energía», pero que todavía requiere la aprobación del Congreso.
En el mismo comunicado, Biden volvió a justificar las sanciones contra el sector energético ruso.
«Como he dicho desde el principio, habrá costos internos cuando impongamos sanciones paralizantes en respuesta a la guerra inmotivada de Putin, pero los estadounidenses pueden saber esto: los costos que estamos imponiendo a Putin y a sus compinches son mucho más devastadores a los costos que se enfrentan».
Los estragos de la arrogancia
Según un informe que publicó este jueves la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, el índice de precios al consumidor urbano creció en febrero un 0,8 %. Para la comida y la energía, el aumento fue del 1,0 y el 3,5 %, respectivamente. En los últimos 12 meses, el índice ha subido 7,9 %.