Ni el grupo de la moda lujosa francesa Louis Vuitton se salvó de la indignación de las protestas contra la reforma de pensiones de Macron.
Este jueves, cuando se registra una nueva jornada de protestas contra el aumento de la edad de jubilación de 62 a 64 años por parte del gobierno de Macron, los manifestantes colmaron los alrededores de la sede de Louis Vuitton. La indignación colectiva bordeó el cuartel general de París del gigante del lujo galo.
El conglomerado de la moda, LVMH, es propietaria de marcas como Louis Vuitton y Moët, y su capitalización bursátil sobrepasa los 400 mil millones de euros.
Reuters destaca que las protestas se produjeron el día en que las acciones de LVMH, alcanzaron un máximo histórico. Las mismas subieron un 4,6% el jueves.
Y llegaron a los 875 euros (965 dólares) cada una, engrosando las arcas de LVHM, como la principal firma europea en registrar aumento de ventas.
En consecuencia, este contraste a favor de la fortuna de su propietario, Bernard Arnault, creó un punto de ebullición para los manifestantes.
“Si Macron quiere encontrar dinero para financiar el sistema de pensiones, debería venir aquí a buscarlo”, dijo Fabien Villedieu, un líder sindical presente en las protestas en LVMH, acota el medio francés BFMTV.
Se esperan unas 600.000 personas en las calles de toda Francia contra las reformas de las pensiones en la última ronda de protestas.
French pension protesters flood LVMH headquarters in Paris https://t.co/0QbhidsQ97 pic.twitter.com/h43K0aiVyi
— Reuters (@Reuters) April 13, 2023