El 80 % de la capital de Haití, Puerto Príncipe, está bajo el control de bandas criminales. Hechos delictivos como incendios de viviendas, secuestros de ciudadanos haitianos y extranjeros, violaciones, robos y asesinatos se han convertido en una amenaza diaria.
Ante esta arremetida, al menos 3 mil personas decidieron abandonar un distrito ubicado en la capital haitiana. Mientras que un reporte de la Organización Internacional para las Migraciones, indica que casi 100 mil haitianos han abandonado los lugares en donde los acogieron inicialmente tras ser desplazados por las pandillas.
En este panorama, las autoridades de ese país solicitaron ayuda a fuerzas internacionales. En octubre de 2022, el primer ministro de Haití, Ariel Henry, hizo esta petición. Ahora el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, reiteró el llamado a conformar un escuadrón internacional para contrarrestar la inseguridad.
Tras la solicitud, Kenia, Bahamas y Jamaica ofrecieron ayuda. Mientras que Estados Unidos dijo que presentará una resolución a la ONU para autorizar una intervención de Kenia. No especificó la fecha en que hará la propuesta.
Líder pandillero emite advertencia
La posibilidad de una intervención de fuerzas policiales y militares foráneas, hizo que el líder de una pandilla denominada “Barbacoa”, que opera en la capital de Haití Puerto Príncipe, se pronunciara.
El pandillero sancionado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), combatirá a cualquier fuerza armada internacional desplegada en el país caribeño si comete algún abuso.
“Si las fuerzas extranjeras llegan en 2023 o 2024 y las vemos agrediendo sexualmente a mujeres, violando a jóvenes como lo hicieron los soldados uruguayos en 2004, si vuelven a traer el cólera a Haití… si eso es lo que vienen a hacer en los barrios desfavorecidos además de abrirnos fuego, matar a la gente o masacrarla, los haitianos los combatiremos hasta derramar nuestras últimas gotas de sangre“, declaró.