La primera ministra de Francia, Elisabeth Borne, informó que el Gobierno de la nación europea prohibirá los cigarrillos electrónicos desechables. Esto con el fin de combatir este hábito nocivo, sobre todo entre los jóvenes.
Borne calificó el consumo de estos dispositivos como un «importante problema de salud pública«. Por lo que informó que el Gobierno francés se encuentra en la construcción de planes a fin de lograr un programa nacional de lucha contra el consumo de tabaco que, detalló, es la causa de 75 mil muertes al año en esa nación.
Aunque no está entre los planes un aumento de impuestos sobre los cigarrillos, dijo Borne que eso «no significa que no vigilemos el consumo de tabaco”.
Otros países de Europa y Oceanía se suman
Bélgica, Irlanda y Alemania han seguido una línea parecida a la de Francia en cuanto a la venta y distribución de los cigarrillos electrónicos desechables.
En ese sentido, la población belga ya no podrá adquirir estos dispositivos por Internet. Al igual que los residentes de Irlanda están siendo consultados en torno a la prohibición de los también llamado vapers.
En cuanto a Alemania, los cigarrillos electrónicos de sabores ya fueron prohibidos por el Gobierno. No obstante la autoridad antidroga de la nación advirtió que se trata del inicio de estas medidas.
Países como Australia y Nueva Zelanda, pertenecientes a Oceanía, también han implementado normativas. En Australia, los que deseen adquirir un dispositivo electrónico durante la transición para dejar de fumar, deben presentar una receta, así como se ha reducido el contenido de nicotina con restricciones en los sabores.
Para la población de Nueva Zelanda están prohibidos la mayoría de los vaporizadores desechables. Se ha enfatizado en la no comercialización dirigida a niños, por lo que las tiendas de este tipo, cercanas a las instituciones educativas, están prohibidas.