El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este martes la prohibición de importaciones de petróleo y gas rusos.
«Hoy anuncio que Estados Unidos está apuntando a la arteria principal de la economía de Rusia», dijo Biden.
Además, detalló que el petróleo ruso ya no se aceptará en los puertos nacionales.
De esta manera, el presidente Biden afirma que Estados Unidos «asestará otro potente golpe contra la máquina de guerra de Putin.»
Asimismo, Biden declaró que Washington entiende que algunos de sus aliados en Europa no pueden unirse a la prohibición de importar energía de Rusia.
«Estamos trabajando estrechamente con Europa y nuestros socios para desarrollar una estrategia a largo plazo para reducir también su dependencia de la energía rusa«.
La arrogancia pese a todo
Al mismo tiempo, Biden admitió que los precios del petróleo se incrementarán tras la prohibición impuesta al petróleo y al gas de Rusia. Por ello prometió hacer «todo lo que pueda para minimizar» el alza de los precios.
The ban on Russian oil and gas has strong bipartisan support in the Congress and in the country.
Americans have rallied to support the people of Ukraine and made it clear we will not be part of subsidizing Putin’s war.
— President Biden (@POTUS) March 8, 2022
En cuanto a la situación en Ucrania, el presidente Biden admitió que Washington y sus aliados continúan suministrando armas al país y aumentando la ayuda humanitaria.
La medida surge luego de que Occidente adoptara una serie de sanciones contra Rusia, en respuesta a su operación militar en Ucrania.
Cabe destacar que el domingo pasado, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, informó en una carta que el Congreso estadounidense estudia la exclusión de Rusia de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Rusia advierte, nuevamente
Por su parte, el viceprimer ministro de Rusia, Alexánder Nóvak, pronosticó este lunes que el rechazo al petróleo ruso «tendrá consecuencias catastróficas para el mercado mundial».
«Un aumento en los precios será impredecible: más de 300 dólares por barril, si no más», dijo Nóvak.