La candidata a la vicepresidencia de Colombia en fórmula con Gustavo Petro, Francia Márquez, publicó en su cuenta de Instagram un emotivo video en el que invita a «votar diferente» para cambiar a Colombia.
«Llegó el momento de hacer que la indignación se convierta en acción. Nos han dicho que cambiar es difícil, que no se puede. Pero, ¿Saben qué? ¡Si se puede! Vamos por el cambio, mi Colombia. Sí podemos construir una Colombia con mayores oportunidades, en paz y en equidad, con trabajo digno, cuidando la casa grande, colocando en el centro la vida. Pero si queremos algo distinto, mi gente, hay que votar distinto«, asegura.
«Llegó el momento de un gobierno del pueblo para el pueblo, el gobierno de la gente de las manos callosas. Este es el momento de las y los nadies. Este es nuestro momento para ir de la resistencia al poder, hasta que la dignidad se haga costumbre», suma Márquez.
En esta pieza de campaña, de tres minutos de duración, esta lideresa colombiana de 40 años de edad que rompe todos los esquemas tradicionales en política por su origen humilde y afro, se identifica como «madre orgullosa, cabeza de familia, hija de agromineros, nacida en el municipio de Suárez, al norte del departamento del Cauca».
Agrega que es una activista social, trabajó la mina tradicional, sembró la tierra y fue empleada del servicio doméstico. Cuenta que con dificultades logró estudiar y prepararse como abogada para «defender a su comunidad». Dice que como la mayoría de los colombianas y colombianos, sabe lo que es trabajar duro por sus hijos y familia en general, por su comunidad y su nación. Añade: «He vivido en carne propia la violencia de este país». «He luchado en las calles y campos por el medio ambiente, la casa grande», adiciona.
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Colombia no aguanta más
«Como ustedes, he visto pasar a los políticos de siempre, con las mismas promesas de siempre, una y otra vez hablando de cambios. Por eso creo que es tiempo de algo distinto. Nuestro país no aguanta más. El salario no alcanza para vivir. El sistema de salud cada vez es más precario y la falta de empleo nos condena al rebusque. No hay garantías para una vejez digna y a diario vemos morir nuestro pueblo por la violencia».
«Siempre nos han dicho que la política no es para gente como yo, que nuestro momento no es ahora. Y yo me pregunto ¿Cuándo será nuestro momento?», suma.
«Estamos cansados de ver cómo los de arriba aumentan sus ganancias a costa de hambre y de la política de muerte», cuestiona como idea central de su campaña electoral.
A menos de 24 horas para las elecciones presidenciales en Colombia, surge la pregunta de si seguirá el uribismo en el poder o si, por el contrario, se abre una oportunidad para un gobierno distinto, que atienda las necesidades del pueblo, que asuma los desafíos de una guerra interna de más de 50 años y desarrolle una política exterior menos subordinada al mandato de Estados Unidos.
