Una reciente investigación del diario colombiano El Tiempo reveló un entramado de corrupción para que el gigante de fertilizantes, Monómeros Colombo Venezolanos (MCV), sellara vínculos con un grupo de empresarios vinculados a la política venezolana.
Anteriormente el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció un plan orquestado por los gobiernos de Estados Unidos y Colombia. Según el mandatario, la meta era que el dirigente opositor Juan Guaidó y su clan se apoderaran y repartieran los activos venezolanos en el exterior; entre ellos Monómeros, Citgo y las reservas de oro en Inglaterra.
Diputados opositores también apoyan la idea de que hay sectores interesados en apropiarse de la empresa venezolana con sede en Colombia. Prueba de ello fue el informe presentado ante la Asamblea Nacional el pasado 25 de octubre.
Pruebas vinculantes
Los parlamentarios se han enfocado en defender a Guillermo Rodríguez Laprea. Aseguran que el plan abarca denuncias sin “ningún tipo de evidencia” contra el empresario.
No obstante, El Tiempo hizo público un correo enviado por el empresario venezolano Carlos Rodríguez Siso en el que le solicita una cita a Carmen Elisa Hernández, miembro de la junta de Monómeros, prueba lo contrario.
“Hola, Carmen Elisa, cómo estás (…) Te adjunto la carta dirigida a tu persona solicitando espacio en la agenda de la junta de Monómeros, para presentar el proyecto del que conversamos (…) Por seguridad, la persona que hará la presentación es Guillermo Rodríguez Laprea, que entiendo se conocen, y es nuestro director comercial en Colombia”, se lee en el mensaje.
Resulta curioso que la misiva fue enviada en la medianoche del 8 de abril de 2020, cuando Laprea ni siquiera era el gerente de Monómeros. Sin embargo, la carta incluía su firma y el logo de Kapocar S.A., firma que buscaba presuntamente expandir la capacidad productiva de Monómeros e importar fertilizante a bajo costo.
En primera instancia la propuesta fue rechazada. Detrás estaba la junta integrada por Fernando Paredes y Jean Paul Dugarte, Luis Hurtado, Ramón Crespo y Carmen Elisa Hernández. Todos vinculados a partidos venezolanos de oposición como Acción Democrática, Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo y Voluntad Popular.
No obstante, pasados dos meses la oferta se presentó nuevamente pero esta vez bajo el nombre de Insumos del Pacífico 195 S.A.S., firma perteneciente a Guillermo Rodríguez Laprea, con sede en Bogotá. Se firmó un documento de entendimiento y un contrato de confidencialidad.
Misma moneda, otra cara
El convenio solo duró 7 meses. El 26 de enero de 2021, Rodríguez Laprea fue nombrado gerente de Monómeros.
De acuerdo con el diario colombiano El Tiempo, cuando Laprea ocupó el cargo gestionó un tercer contrato. Esta ocasión sería por un período de 15 años con la empresa LionStreet Ventures Corp. S.A., creada en 2018 con sede en Panamá. La misma esta representada por Ricardo Rodríguez Siso, hermano de Carlos Rodríguez Siso (el mismo que envió el correo de Kapocar).
Acá es oportuno resaltar que la familia Rodríguez Siso pertenece a la élite económica, social y política venezolana. Sus miembros han asesorado candidaturas presidenciales, como la del actual gobernador del estado Zulia, Manuel Rosales en 2006.
De vuelta al tema de LionStreet, el sindicato de Monómeros denunció poco tiempo después que 60% de las ganancias de ese contrato fueron destinadas a la firma con sede en Panamá.
Por su parte, dos miembros de la junta de Monómeros, Carmen Elisa Hernández y Luis Hurtado, alertaron sobre una desviación del objetivo original de dicho contrato.
Un denunciante contactado por el periódico colombiano, aseguró que “el gerente intentó hacer negocios con Monómeros para su beneficio y el de los Rodríguez Siso”.
Por su parte, a Ricardo Rodríguez Siso no tuvo más opción que suspender el contrato, pues según él “había intereses ocultos de terceros para perjudicar el nombre de su empresa”.
¿Qué devela el informe presentado por diputados opositores?
El documento presentado ante el parlamento nacional relata un presunto plan para desestabilizar a Monómeros y lograr que la empresa Nitron Group se apoderara de ella.
El método sería quedarse con la mayoría del pasivo, para luego convertir las deudas en acciones durante un proceso de insolvencia.
Una “joya” en ruinas y endeuda
El Tiempo develó en su investigación que Monómeros posee deudas con proveedores por un monto que ronda los 130 mil millones de pesos. Además, las fotos presentadas por el diario colombiano dejan en evidencia el deterioro de planta.
Para poder recuperarse en un lapso de 5 años, expertos contactados aseguran que se necesitan gastos logísticos y financieros que ascienden a 26 mil 218 millones de pesos.
Pese a que Monómeros no cuenta con los recursos para su mantenimiento, la empresa venezolana perdió 810 mil dólares en un contrato fallido en 2020. En diciembre de ese año la compañía Prime Food Import acordó la compra de 9 mil toneladas de urea granular. Las mismas debían llegar en febrero de 2021, pero la entrega no se concretó y tampoco se tomaron acciones legales.
El Tiempo intentó contactar a Carmen Elisa Hernández, a Carlos Rodríguez Siso y a los representantes de Nitron. Sin embargo, todos se abstuvieron de hablar del asunto.
Entre tanto, El gerente de Monómeros, Guillermo Rodríguez Laprea, sostiene el mismo discurso de los diputados opositores sobre un “complot” en su contra.