Con un baño de multitudes el Real Madrid celebró un nuevo título continental con su gente en la famosa Plaza de las Cibeles, esto en la capital de España.
Nada más al culminar la Gran Final de la Champions League, con victoria blanca 1-0 sobre el Liverpool de Inglaterra, la plaza de Madrid comenzó a llenarse de aficionados para la tradicional celebración.
El capitán Marcelo, quien fue el encargado de levantar la Copa, aprovechó la oportunidad para despedirse. «Cierro un ciclo aquí en el Real Madrid, pero haré algo con el club porque este es el club de mi vida. Tengo algunos años para jugar y tal pero necesito volver ya. He vivido noches aquí, días, entrenamientos, toda mi vida».
Aproximadamente 400 mil personas, según el gobierno de Madrid, celebraron desde la madrugada del domingo a la espera del equipo. La nota negativa es que la celebración se saldó con más de 50 heridos y cuatro detenidos.
Los aficionados madridistas no pararon de cantar y celebrar durante un par de días. Cánticos en honor a Courtois y Benzemá, y no podían faltar las dedicatorias al francés Kylian Mbappé.
La fiesta se concretó con la llegada del equipo a la plaza y la famosa ofrenda a Cibeles por parte de Marcelo. El brasileño fue el encargado de poner la bufanda y llevar la Copa hasta lo más alto.
Una nueva Champions y una nueva celebración en Cibeles, la tradición del Real Madrid en la capital española.
