El 27 de febrero de 1989 es la fecha de un suceso que marcó la historia venezolana: “El Caracazo”. Ese hecho, inspiró la película “El 27: Yo me acuerdo”.
Ese día, salieron los habitantes de los cerros de Caracas para decir “No” a la políticas neoliberales del recién estrenado segundo gobierno de Carlos Andrés Pérez.
La voz de los protagonistas
Un momento icónico quedó retratado en el documental “El 27: Yo me acuerdo”. Liliane Blaser y Lucía Lamanna, cineastas, documentalistas y defensoras de los derechos humanos, se ocuparon de una remembranza, que nos dejó un relato a manera de crónica audiovisual.
Esta narración documental, se estrenó en febrero de 2016. Tiene una duración de 22 minutos y es una memorable narración que teje imágenes del momento.
Junto a testimonios de sus protagonistas y testigos de ese entonces, se convirtió en un relato épico. El pueblo no olvidó su momento de rebeldía y también de lamento.
Neoliberalismo ajustició a miles
Fueron miles de muertos y desaparecidos. Miles fueron detenidos, torturados y ajusticiados. Algunos fueron a parar a fosas comunes. Otros están desafortunadamente en un limbo, donde hasta ahora nadie puede ubicarlos.
Y para seguir manteniendo la memoria de esta historia rebelde, se sigue exhibiendo este documental “El 27: Yo me acuerdo”. En la combatiente parroquia del 23 de enero de Caracas, este 22 de febrero a las 5.00PM estará Blaser junto a la comunidad.
“Yo me acuerdo” documental rebelde
La plazoleta de los bloques 24 y 25 en la Zona Central, es el escenario. Otras actividades conmemorativas se darán en los siguientes días. Este jueves 24 de febrero, en la radio al Son del 23, estará el fotoperiodista Francisco Solórzano (Frasso); quien departirá con los presentes en el foro Qué pasó en febrero del 89.
Y este domingo 27 de febrero en la Plaza José Gregorio Hernández de Monte piedad desde la 1.00PM, el pueblo está convocado a un acto cultural. Las organizaciones y movimientos sociales llaman al “27 de Febrero la rebeldía continúa, la patria llora a sus hijos”.
Es así, como “El 27: Yo me acuerdo”, quedó como una obra que podrán ver las futuras generaciones.