Este martes, funcionarios del gobierno estadounidense indicaron al diario The New York Times que la explosión de los gasoductos rusos Nord Stream, registrada en septiembre pasado, fue provocada por un grupo pro Ucrania.
Las fuentes citadas por el medio aseguraron que por ahora no existen evidencias de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, este relacionado con el incidente. Según señalaron, tampoco hay pruebas de que altos mandos del ejército “estuvieran involucrados en la operación”. Igualmente, desconocen si “los perpetradores actuaron bajo la dirección de cualquier funcionario del Gobierno ucraniano”.
Los funcionarios estadounidenses tampoco detallaron quienes integraron ese grupo pro Ucrania que atacó los gasoductos Nord Stream. Del mismo modo, no precisaron quien dirigió la operación o pagó por su realización.
De acuerdo a sus declaraciones, existe “la posibilidad de que la operación podría haberse realizado de manera extraoficial por una fuerza proxy“. Sin embargo, no descartan que los miembros del grupo atacante tuviera “conexiones con el gobierno ucraniano o sus servicios de seguridad”.
“Es más probable que los explosivos fueran colocados con la ayuda de buzos experimentados que no parecen trabajar para servicios militares o los de inteligencia”, se lee en el artículo publicado en el diario. Seguidamente, en otro párrafo señalan la posibilidad de que “los perpetradores recibieran entrenamiento especializado del gobierno en el pasado”.
Asimismo, el periódico precisó que no hay indicios de que Rusia esté involucrada en ese ataque, para intentar crear una operación de bandera falsa. Además, negaron que algún ciudadano estadounidense o británico haya participado en el atentado.
Pruebas demuestran que EEUU participó en la explosión
No obstante, el pasado mes de febrero el ganador del premio Pulitzer en 1970, Seymour Hersh, develó cómo Washington ejecutó un plan para explotar el oleoducto.
El reportero publicó en su blog personal un artículo donde detalló las acciones tomadas por el gobierno estadounidense contra la infraestructura. Según explicó, EEUU envió un grupo de buzos de la Marina para que colocaran unos explosivos debajo del agua. Aunque Hersh no precisó nombres, cito a una fuente relacionada con el incidente, quien le ofreció los detalles de cómo ocurrieron los hechos.
“El presidente de Estados Unidos prefirió que Alemania pasara frío a que el país pudiera decidir no apoyar la guerra de Ucrania, y creo que eso es algo devastador para la Casa Blanca. Para mí, y también para la gente que llevó a cabo la misión, es terrible”, afirmó.
