Los tres gobernadores de oposición electos el pasado 21 de noviembre visitaron al presidente Nicolás Maduro este martes en el Palacio de Miraflores (Caracas) porque reconocen su legitimidad e investidura. Así lo analizó el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, durante su participación en el acto de juramentación del gobernador electo en el estado Guárico, José Vásquez.
“Se estrecharon la mano, conversaron. Todos le pidieron apoyo al presidente Nicolás Maduro para gobernar. ¿Por qué? Porque el presidente de Venezuela se llama Nicolás Maduro. No hay otro. ¿Y fueron a Miraflores a visitar a quién? A Nicolás Maduro. Ese es el juego democrático, el reconocimiento del adversario”, dijo el también diputado a la Asamblea Nacional.
Agregó que “si alguien ha sido artífice de la paz con sus constante llamado al diálogo ha sido el presidente Nicolás Maduro. Hemos demostrado que con elecciones se puede decidir el futuro de un país, de un estado, municipio y un concejo municipal. Y debe venir el respeto y el reconocimiento a los ganadores y ganadoras y que cada quien asuma el rol que corresponda. Por ejemplo, donde gana el chavismo es lógico que tenga una o varias oposiciones. Ahora, donde ganó la oposición, el chavismo tiene que convertirse de manera inmediata en la contraparte”.
En ese sentido, conminó a todos los factores: “Llegó la hora de hacer política y dejar el tirapiedrismo atrás”. “Debemos ser capaces de hacer propuestas necesarias para el bienestar del país. La poca experiencia que uno tiene nos hace ver que vienen cosas buenas para Venezuela”, vaticinó. “Llegó la hora de hacer política, quien no lo entienda se va a quedar atrás”, insistió.
Unidad y gobernar junto al pueblo
Al gobernador José Vásquez le recomendó llamar a los candidatos de oposición que no ganaron y “les pediría sus propuestas a ver si las cumplimos, a lo mejor hay algo interesante allí. En este caso José Vásquez presentó un programa de gobierno que se hizo junto al pueblo”.
Asimismo Cabello reiteró su llamado a gobernar junto al pueblo. “El pueblo envía señales claras y nos indica que hay que cambiar algunas cosas (…) A partir de su juramentación firman una condena placentera de atención al pueblo las 24 horas del día. Ninguno llegó hasta aquí obligado”.
Reflexionó sobre lo difícil que ha sido ejercer cargos de elección popular en medio de un bloqueo que impide la llegada de recursos para el cumplimento de proyectos y generación de políticas públicas. Pero, “ahora les toca a dirigentes de oposición que triunfaron el pasado 21 de noviembre, gobernar también en medio de bloqueo. Ahí es dónde vamos a ver si el cambur verde mancha”.
Por último dijo que está a la orden del estado “para cualquier problema que haya que no se consiga una vía ahí estaremos nosotros para ser el articular con el Gobierno nacional”. “Siempre estará mi mano extendida con lealtad, jamás verán un acto que no vaya dirigido a hacerle honor a la amistad, el compañerismo y la militancia”, concluyó.
