Este miércoles, la Sala de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de Colombia, abrió el Caso 11, dónde se revelaron cifras importantes sobre los crímenes por violencia sexual, reproductiva y de género, durante los años de conflicto.
Otros delitos que se expusieron a la opinión pública, están asociados a la orientación sexual, o la expresión e identidad de género diversa.
El Caso 11 contempla, además, tres subcasos. Siendo el subcaso 1 aquél donde se imputan a integrantes de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP).
#Atención La JEP abre #Caso11 que investiga la violencia basada en género, incluyendo violencia sexual y reproductiva, y crímenes cometidos por prejuicio.
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— Jurisdicción Especial para la Paz (@JEP_Colombia) September 27, 2023
El subcaso 2 donde se acusan a miembros de la fuerza pública. En este subcaso los actores están vinculados con la violencia basada en motivos de género contra personas civiles.
Mientras que en el subcaso 3 a las dos fuerzas antes mencionadas, son investigadas por violencia de género y por perjuicio al interior de sus organizaciones durante el conflicto armado.
En un comunicado, la JEP expuso sobre el Caso 11, que «pone un foco especial en los elementos discriminatorios de estas violencias y en las dinámicas de guerra«.
Asimismo, señala que estos elementos «reflejan y multiplican las discriminaciones estructurales que históricamente han afectado a mujeres, niñas y personas con orientaciones sexuales, identidades y expresiones de género diversas”.
Cifras del Caso 11
La JEP encontró que entre 1957 y 2016 se registraron 35 mil 178 víctimas. Cifra de la cual el 89,2 % son mujeres y el 35% niñas y adolescentes.
Las féminas, según el informe sufrieron violencia de género, sexual, reproductiva, y perjuicio por parte de los actores antes mencionados. Hay datos que aportan que los delitos se cometieron también contra afrodescendientes, raizales o palenqueras, indígenas y del pueblo rom.
Los datos también revelaron que el mayor número de crímenes en Colombia se atribuye a grupos paramilitares con el 33 % de casos. Seguidamente, con un 5,82% las FARC-EP y, por último, agentes del Estado con un 3,14 %.
Subcaso 1
De acuerdo con el informe de la JEP, el subcaso 1, que imputa a miembros de las antiguas FARC-EP, los crímenes están relacionados con la orientación sexual de civiles.
Asimismo, reveló que el desplazamiento forzado, es el principal crimen, según 67 % de los relatos, y en segundo lugar la violencia sexual, con 20 %. Esto, con la finalidad de «corregir» o «castigar» la orientación sexual de la víctima.
Otro dato importante expone que el 67 % de los crímenes se cometieron contra las víctimas solo «por el hecho de ser mujeres«. Igualmente, mostraron que muchas de estas mujeres estaban «solas» o prestaban servicio doméstico a estos grupos.
Subcaso 2
En este subcaso que involucra a la Fuerza Pública, se identificaron dos patrones de conducta. El primero buscaba «someter, perseguir, estigmatizar y eliminar a las víctimas, debido a su orientación, identidad o expresión de género diversa«.
Entretanto, el segundo patrón refiere que el 82 % de los crímenes, que afectaron a menores y mayores de edad, los cometieron contra las víctimas «por ser mujeres«.
De hecho, el informe puso de manifiesto que los agentes involucrados «castigaban» generalmente con violencia sexual a las civiles que percibían como «propiedad del enemigo«.
Subcaso 3
En cuanto a este subcaso del Caso 11, se tiene evidencia de que había «órdenes de género dentro de las fuerzas (FARC-EP)«. Ello quiere decir, que la masculinidad se manifestaba con agresiones contra «lo que se considera femenino y subordinado«. Actuaciones que se reforzaron con los rangos militares.
También se estiman crímenes como: aborto forzado, anticoncepción forzada, acoso sexual e imposición de sanciones por negarse a requerimientos sexuales, entre otros, refiere el medio ruso RT.
