La ministra de Seguridad del Gobierno de Javier Milei, Patricia Bullrich, dijo este jueves, que habrá «consecuencias» para quienes decidan hacer protestas contra las medidas económicas presentadas por el mandatario de Argentina.
Esta jornada, Bullrich presentó desde la sede del Ministerio de Seguridad, en Buenos Aires, la estrategia de seguridad del Gobierno argentino para controlar las manifestaciones en la vía pública.
«Sepan que si se toman las calles, va a haber consecuencias«, expresó la ministra de Seguridad.
Señaló que las fuerzas federales intervendrán, ante cualquier delito en «flagrancia» relacionado con el bloqueo de las calles.
«Las cuatro fuerzas federales, más el Servicio Penitenciario Federal (SPF), van a intervenir frente a cortes, piquetes y bloqueos, sean parciales o totales. La ley no se cumple a medias. Se cumple o no se cumple«, advirtió Bullrich.
La excandidata a la presidencia, destacó que el propósito de la estrategia es «cumplir la ley«. Además, afirmó que «la forma de pedir o buscar un beneficio social« ya no es «por la vía del corte«. Manifestó, haciendo referencia a las protestas y a la toma de calles para exigir derechos básicos.
En ese contexto, la ministra añadió que el objetivo de las fuerzas federales será liberar «el espacio de circulación».
De modo que para la liberación de las vías bloqueadas, las fuerzas de seguridad implementarán «la mínima fuerza necesaria y suficiente y será graduada en proporción a la resistencia«.
Nuevas penalizaciones
Bullrich también habló de un proyecto de ley que contempla nuevas penalizaciones a la protesta. Esto, precisó, según el artículo 194 del Código Penal.
Dicha cláusula establece un castigo de prisión de 3 meses a 2 años a quien «estorbare o entorpeciere el normal funcionamiento de los transportes por tierra, agua o aire«.
Igualmente, detalló que no sancionarán a quienes lleven niños a las protestas. «No queremos que usen a los niños como escudos”, manifestó.
Indicó que las personas que impidan la libre circulación serán identificadas. Mientras que los buses que transporten manifestantes, así como sus conductores, serán retenidos por la Policía.
Por otro lado, alertó que «los costos de la seguridad los pagarán las organizaciones» políticas, sociales o sindicales que convoquen la manifestación.
Estas regulaciones, por parte del Gobierno de Milei, impedirán la realización de protestas en calles y avenidas principales y alternas. También afectará a los «piqueteros«, como se le conoce a movimientos sociales de Argentina que suelen cortar las calles para manifestarse.
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