Hace 100 años estaba naciendo en la capital venezolana quien se convertiría en uno de los máximos exponentes del arte óptico y cinético, Carlos Eduardo Cruz-Diez, quien inició desde muy joven su indagación, única, en los efectos del color, separándolo de la forma.
Todo ese trabajo reflexivo, investigativo y experimental de Cruz-Diez, lo llevó a crear las series que hoy, a escala mundial, son un legado:
- Parénquima
- Ritmos vegetales
- Fisicromías
- Inducciones cromáticas
- Cromointerferencias
- Cromosaturaciones
- Cromoscopios
- Transcromías aleatorias
- Cromoprismas aleatorios
- Ambientes cromointerferentes
Los venezolanos están vinculados en su quehacer cotidiano con el trabajo de Carlos Cruz-Diez, este artista que hoy cumple 100 años, más de 70 entregados al color. Incluso, emocionalmente, la población vincula al artista con el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, en Maiquetía, estado La Guaira. Allí se alberga la emblemática obra: Muro y pisos de Couleur Additive (1974).
En ese contexto, no solamente son los caraqueños los que tienen la oportunidad de apreciar la labor artística de Carlos Cruz-Diez, en espacios como Plaza Venezuela, en el Centro de Acción Social por la Música o el mismo Museo de la Estampa y del Diseño que lleva su nombre. En la capital larense se encuentra la Cromoestructura Radial, homenaje al Sol (1982). También, su Inducción Cromática por Cambio de Frecuencia Doble Faz (1991), está en el campus de la Universidad de Los Andes, en Mérida.
Obras en el ambiente urbano
“Las obras que realizo en el ambiente urbano y en el hábitat están concebidas como un discurso plástico que se genera en el tiempo y en el espacio, creando ‘situaciones’ y ‘acontecimientos cromáticos’ que cambian la dialéctica entre espectador y obra“, aseveró el mismo Cruz-Diez desde Paris, Francia, en 1996.
Asimismo, desde esta ciudad, donde falleció en 2019 después de haber trabajado y pasado gran parte de su vida allí, aseguró que sus obras no contienen un “discurso referencial”.
En ese sentido, su propuesta era distinta al arte gótico, mostrado en el Renacimiento o a las obras de los muralistas mexicanos.
“El punto de partida de mis obras es diferente, ya que sustituyen el tiempo y el espacio reales al tiempo referencial o transpuesto. Mis obras son el soporte de un evento que evoluciona y cambia“, explicó en aquel entonces el caraqueño.
Perú, Brasil, Estados Unidos, Francia, España, son alguno de los países donde hay obras del obras del artista venezolano. En espacios tan comunes como calles y estaciones de trenes está la huella de Cruz-Diez.
Premiado con la Turner Medal (2015) y el Premio Internacional Trebbia (2016). Su trabajo es mostrado en importantes museos como:
- The Tate Modern, Londres.
- The Museum of Modern Art, Nueva York.
- Centro Nacional de Arte y Cultura Georges Pompidou, París.
- Musée d’Art Moderne de la Ville de Paris.
- The Museum of Fine Arts, Houston.
Ya que este exponente del arte óptico y cinético, llegó a su centenario este jueves 17 de agosto, para honrar su memoria, se realizará, entre otras actividades, la exposición de una selección de obras de la colección Fundación Museos Nacionales en el Museo de la Estampa y del Diseño que lleva su nombre, en Caracas.